/ viernes 24 de mayo de 2024

Anatomía de lo social / Cierres

No puede haber grandes dificultades

donde abunda la buena voluntad.

Maquiavelo


De acuerdo con las disposiciones legales para la realización de las elecciones, finalmente ha llegado la fecha para realizar la jornada electoral, desde luego hay que acotar el cierre de las campañas electorales, establecido para el miércoles 29 de este mes que corre, hasta ese día los candidatos tendrán, como límite, la oportunidad para realizar las últimas actividades cuyo propósito sea el de convencer a la ciudadanía de ser la mejor opción, y lograr el tan anhelado sufragio a su favor.

Mientras tanto, en estos últimos días, específicamente el 30 de mayo, dará inicio la veda electoral, misma que se extinguirá hasta el día de la jornada, es decir, el dos de junio, lo que implica, en estos términos temporales, la prohibición de cualquier expresión que pueda considerarse como actos de campaña. En otro sentido, el Instituto Nacional Electoral debe tener preparadas las boletas que se utilizarán el día de las votaciones; con estas acciones, entre otras tantas, el INE contribuye, según la ley, al desarrollo de la vida democrática, fortaleciendo la confianza y la participación ciudadana en la vida política del país.

Para quienes han tenido la oportunidad de observar, participar y decidir, en este largo proceso, a punto de extinguirse, han podido advertir las diferencias entre todos aquellos que se convirtieron en candidatos y, al final, puedan ocupar un cargo de elección popular y representar a los ciudadanos en el ámbito de sus competencias; en el proceso, se construyeron diferentes paradigmas que permitieron acercarse a la gente, particularmente el uso de las redes sociales, que en algunas circunstancias parcializaban los comentarios, perdiendo la objetividad y la intención para convencer.

Estas formas de propaganda, en algunas ocasiones desvirtuaban la información para favorecer a una determinada o determinado candidato; aunque, por otro lado, había medios informativos que difundían un punto de vista bajo criterios estrictamente racionales y objetivos, haciendo valoraciones de la presentación de las propuestas y el impacto que, se supone, tendrían entre los electores, en lo general, los reflectores se movieron hacía quienes se denominaron candidaturas, como se les nombró en los debates presidenciales.

En este sentido, muchas personas tuvieron, también, la posibilidad de cuestionar y criticar las posturas de los debatientes, pudiendo definir las participaciones de forma distinta, descartando la posibilidad de lograr el cargo más alto de la nación, dejando abiertamente la opinión de acuerdo a los discursos usados en esos eventos que tuvieron una alta audiencia; desafortunadamente, hubo quien no supo aprovechar el foro y solo utilizo el mismo para manifestarse en contra de un régimen, utilizando un lenguaje que en otros tiempos sirvió a un presidente que tenía la característica de usar botas en sus actividades cotidianas.

Sin duda, esta experiencia de banalidades, acusaciones y desatinos, ha servido para quienes en otros niveles territoriales, donde también habrá elecciones, les sirvieron para determinar y estructurar los discursos que impactaron a quienes el próximo dos de junio asistirán a las urnas para sufragar; desde luego, como se ha comentado en otras oportunidades, en la jornada electoral permeará, así se espera, el uso de la razón, sin cuestionamientos y reproches para quienes aspiran a ocupar una curul o una silla principal en un ayuntamiento; eso es precisamente lo que se define a partir de un conocimiento sobre el estado actual de las cosas, además de una preparación académica que sea una fortaleza para el futuro servidor público.

Aunque en territorio Tlaxcala es un estado pequeño, es grande en su cultura, en costumbres y tradiciones, en la calidez de su gente, entre otras tantas particularidades; por ello, nos merecemos una representación que dignifique a lo vivido anteriormente, que tenga las habilidades suficientes para hacer gestión, que se identifique con la gente por su origen, que tenga la posibilidad de establecer proyectos, que permita la posibilidad de que la gente colabore en un trabajo de grupo; a eso se le puede llamar un trabajo colaborativo, dejando atrás las añejas formas de gobernar, construyendo un nuevo paradigma sobre la aplicación de una buena política que ayude a resolver todos los problemas de Tlaxcala. Por lo tanto, con estos argumentos, se pudiera decir que se tendrá un buen cierre de campañas.

Nos merecemos una representación que dignifique a lo vivido anteriormente, que tenga las habilidades suficientes para hacer gestión, que se identifique con la gente por su origen, que tenga la posibilidad de establecer proyectos...