/ jueves 30 de septiembre de 2021

Espacio ITE | Democracia y cultura cívica

  • * Edgar Alfonso Aldave Aguilar

El miércoles 15 de septiembre pasado, se conmemoró el Día Internacional de la Democracia, como una forma de organización social legalmente instituida en algunos países, y entendía igual como un sistema o régimen político que otorga poder al pueblo y legitimidad a sus representantes a través de la elección popular.

En concreto, la democracia se resume en la toma de decisiones por una colectividad, acatadas y respetadas por las y los mismos con un margen de representatividad y mayoría. La democracia no presume el consenso absoluto, pero sí el escuchar todas las voces y otorgar representatividad a sectores minoritarios.

Hasta el momento, la democracia que se conoce por la ciudadanía en general es la denominada representativa, que tiene que ver exclusivamente con elegir representantes populares; supone la posibilidad de participación de toda la ciudadanía y otorga la sucesión del gobierno de manera ordenada y pacífica.

Ahora bien, a partir del 21 de y hasta el 24 de septiembre se realiza en su onceava edición, el Encuentro Nacional de Educación Cívica (ENEC), que tiene como fin principal, que las instituciones electorales y promotoras de la democracia en México, se unan para compartir sus experiencias y avances en torno al fomento y difusión de la cultura cívica.

En este evento, además de reunir a grandes expertos en la materia, tiene la finalidad de convocar a la mayor cantidad de ciudadanía posible y, que a través de las nuevas modalidades de interacción, permite que personas de distintas latitudes del país o incluso fuera de él, sigan los 6 paneles que abordan cuatro ejes temáticos, como son inclusión, tendencias, buenas prácticas desde lo local y a nivel nacional y colaboración interinstitucional y social.

Con ello, se busca que la ciudadanía conozca y se interese por temas de democracia participativa o directa, que es a manera muy resumida, la intervención de la ciudadanía en los asuntos públicos, sean cualesquiera y desde cualquier espacio.

Por ello, el ITE sigue los trabajos del ENEC, con el fin no solo de compartir sus experiencias y buenas prácticas, sino el conocer y en su momento, replicar aquellos casos de éxito realizados en otras entidades federativas. Actividades de difusión de la cultura cívica como elecciones escolares o su micrositio; actividades lúdicas como juegos y cuentos; así como foros, talleres y conferencias que actualmente realiza el Instituto, se ven fortalecidos por estos eventos que promueven la participación y difusión de la cultura cívica a nivel nacional.

Pero lo más importante, es compartir y generar ideas y alternativas para que la ciudadanía se interese en estos temas, pues la democracia debe verse reflejada en cada espacio público, en cada decisión, programa y política pública; pues así se logrará un beneficio colectivo y desarrollo social. Para lograrlo, se requiere de una educada en valores cívicos y democráticos.