/ lunes 9 de enero de 2023

La Otra Cara De La Moneda | Abusos y costumbres

Si bien es cierto que el aumento en el precio del pasaje urbano está justificado por el incremento generalizado en las gasolinas y las refacciones automotrices, además de la disminución de pasajeros que se tuvo durante el 2020 y parte del 2021, por la pandemia generada por Covid-19, también es real que los concesionarios han abusado.

En los últimos días del 2022 y a inicios del 2023, operadores del servicio público hicieron de las suyas, luego de que el pasado 23 de diciembre se ajustará el incremento de un peso a la tarifa en el parada mínima y 35 centavos por kilómetro adicional. En estos días, los concesionarios llegaron a cobrar hasta 5 pesos más por cada parada, situación que afectó la economía de los tlaxcaltecas.

Si los concesionarios del transporte público pidieron al gobierno del estado les autorizara el incremento, fue porque alegaron que su economía se estaba viendo afectada, y que aún no se han recuperado de la crisis económica que dejó la pandemia, situación que ellos no pensaron al cometer abusos con los ciudadanos que a diario viajan en sus unidades.

Ante ello, de forma inmediata, la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) integró y revisó los tabuladores de las 480 rutas que existen en el estado, con el objetivo de fijar los costos que se deben aplicar en cada una de ellas, para evitar abusos por parte de los operadores.

La SMyT fue clara al respecto al reiterar que operador que cometa abusos será sancionado con 30 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), además de que su unidad será remita al corralón, la cual no podrá recibir ningún descuento en este tipo de infracciones.

El transporte público es una necesidad y un derecho humano que tiene un considerable sector de la población para su traslado a diversas partes del estado, y si bien es cierto que es el negocio de muchos concesionarios, tampoco se deben permitir abusos por parte de estos.

Los concesionarios del transporte tienen que ser empáticos con los ciudadanos y adaptarse a las condiciones de cada momento; con el aumento de las tarifas que ya les fue autorizado, lo que deben efectuar de forma inmediata es mejorar el trato que dan a los usuarios, pues aún existen muchas quejas en el servicio que brindan.

En estos días, los concesionarios llegaron a cobrar hasta 5 pesos más por cada parada, situación que afectó la economía de los tlaxcaltecas.

Si bien es cierto que el aumento en el precio del pasaje urbano está justificado por el incremento generalizado en las gasolinas y las refacciones automotrices, además de la disminución de pasajeros que se tuvo durante el 2020 y parte del 2021, por la pandemia generada por Covid-19, también es real que los concesionarios han abusado.

En los últimos días del 2022 y a inicios del 2023, operadores del servicio público hicieron de las suyas, luego de que el pasado 23 de diciembre se ajustará el incremento de un peso a la tarifa en el parada mínima y 35 centavos por kilómetro adicional. En estos días, los concesionarios llegaron a cobrar hasta 5 pesos más por cada parada, situación que afectó la economía de los tlaxcaltecas.

Si los concesionarios del transporte público pidieron al gobierno del estado les autorizara el incremento, fue porque alegaron que su economía se estaba viendo afectada, y que aún no se han recuperado de la crisis económica que dejó la pandemia, situación que ellos no pensaron al cometer abusos con los ciudadanos que a diario viajan en sus unidades.

Ante ello, de forma inmediata, la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) integró y revisó los tabuladores de las 480 rutas que existen en el estado, con el objetivo de fijar los costos que se deben aplicar en cada una de ellas, para evitar abusos por parte de los operadores.

La SMyT fue clara al respecto al reiterar que operador que cometa abusos será sancionado con 30 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), además de que su unidad será remita al corralón, la cual no podrá recibir ningún descuento en este tipo de infracciones.

El transporte público es una necesidad y un derecho humano que tiene un considerable sector de la población para su traslado a diversas partes del estado, y si bien es cierto que es el negocio de muchos concesionarios, tampoco se deben permitir abusos por parte de estos.

Los concesionarios del transporte tienen que ser empáticos con los ciudadanos y adaptarse a las condiciones de cada momento; con el aumento de las tarifas que ya les fue autorizado, lo que deben efectuar de forma inmediata es mejorar el trato que dan a los usuarios, pues aún existen muchas quejas en el servicio que brindan.

En estos días, los concesionarios llegaron a cobrar hasta 5 pesos más por cada parada, situación que afectó la economía de los tlaxcaltecas.