Lo vivido tras los resultados de la jornada electoral del 2 de junio es apenas el tentempié de lo que se avecina en el Congreso local.

A la novela morenista intitulada: “Dos mujeres una curul”, le restan muchos capítulos más y uno de ellos comenzará el próximo 29 de agosto, cuando -de no suceder otra cosa- Ana Bertha Mastranzo Corona, quien ganó en el Distrito XV con apenas 11 votos de diferencia, asuma el cargo de diputada local.

La decisión de la Sala Regional Ciudad de México del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que le devolvió el triunfo al señalar que existió “error o dolo” por parte del Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET), representó oxígeno puro para la oriunda de San Pablo del Monte.

Pero el buen sabor de boca podría convertirse en amargura cuando la bancada mayoritaria se entere quién será el enlace del Poder Ejecutivo con el Legislativo.

Una vez que la todavía legisladora con licencia, Marcela González Castillo, vería frustrado su propósito de repetir en el cargo, pese a todas las argucias legales que intentó con la ayuda de quienes actualmente dominan en la Secretaría de Gobierno y el TET, todo indica que sería nombrada enlace directo de la mandataria Lorena Cuéllar Cisneros con los próximos diputados.

Su efectivo papel como interlocutora la haría convertirse en una figura clave y con poder de decisión, de ahí que ya se habla de que podría ejercer una posición similar a la que ostentó en los últimos tres años como negociadora política.

Tal vez a eso se deba que los diputados electos por la coalición “Sigamos haciendo historia por Tlaxcala”, que encabezó Morena con partidos aliados, han comenzado a mostrar inconformidad, pues a una semana de asumir el cargo no los han llamado a reuniones ni para que les digan qué brazo deben levantar durante su toma de protesta.

Así como se observa el panorama, se vislumbra que el papel de quienes integrarán la bancada morenista se reducirá a levantar el dedo para aprobar, sin chistar, cada iniciativa, reformas, leyes y presupuestos que les sean enviados.

Por cierto, ahora que se prevé que Marcela González no repetirá como presidenta de la Junta de Coordinación y Concertación Política, trasciende que el experredista y ‘neomorenista’ Ever Campech Avelar asumirá ese cargo, al tener una estrecha relación con su correligionaria.

HAZMERREÍR

Aunque nadie lo extrañó, qué bueno que el presidente del TET, Miguel Nava Xochitiotzi, no acudió a la celebración del 30 aniversario del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), de lo contrario se hubiera convertido en la comidilla.

Bien dicen que en política nada es casual y por ello resalta que justo el día que se festejaba la creación del organismo autónomo, que representa el principal baluarte de la democracia tlaxcalteca, fue tumbada la decisión del TET de quitarle el triunfo a Ana Bertha Mastranzo para favorecer a Guillermo Hueyotlipan Barrón, abanderado de Movimiento Ciudadano y, con ello, modificar el resultado de las plurinominales.

Bien lo dijo el presidente del ITE, Emmanuel Ávila González: “la ciudadanía tlaxcalteca es altamente politizada, pero cada ciudadano sabe el valor de su voto, sabe premiar a su gobernante, pero también lo sabe castigar, lo que hace a la entidad vivir en un sistema político complejo”.

Al mediodía del próximo jueves, la Sala Regional Ciudad de México del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación abordará el caso Huamantla, cuya decisión del TET fue anular los resultados del 2 de junio y convocar a una elección extraordinaria.

De acuerdo con expertos electorales, se anticipa que el expediente SCM-JDC-2111/2024 corra la misma suerte que el Distrito XV y, con ello, el TET que encabeza Miguel Nava, con todo y que el pasado 14 de agosto se sacó de la manga un foro “internacional” de derecho electoral, se convierta una vez más en el hazmerreir por pretender torcer la legislación electoral bajo presuntos intereses personales.

RUN RUN

Ya encarrerados con los trascendidos, cada vez se intensifica la versión de que la expresidenta del PRI y senadora electa por la primera minoría, Anabell Ávalos Zempoalteca, se sumará a la bancada ni más ni menos que del Partido Verde Ecologista de México, para así facilitarle a Morena y aliados tener esos dos votos que le faltan para convertirse en mayoría calificada en el Senado de la República.

El negociador en esta trama es el exgobernador priista y actual morenista José Antonio Álvarez Lima, quien fue el primer jefe de Ávalos Zempoalteca cuando ésta iniciaba su carrera política a finales de los años 90´s, desempeñándose como directora del DIF estatal, al lado de la extinta y bien recordada Verónica Rascón.

Aunque la excandidata derrotada al gobierno estatal en 2021 no ha confirmado ni negado esos dichos, su silencio y su más reciente publicación en su perfil de Facebook deja muchas dudas.

Se sabe que durante el nombramiento de Alejandra Frausto como Embajadora Distinguida de la Cultura del Estado de Tlaxcala, acto al que acudió la exgobernadora y aún senadora Beatriz Paredes Rangel, Anabell Ávalos se reunió más tarde con ella para escuchar sus consejos previo a su arribo a la Cámara Alta, además de recibir línea para allanarle el camino al camaleónico Enrique Padilla Sánchez, para que próximamente asuma la dirigencia del PRI estatal.

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