Algo muy oscuro, con tintes sombríos y rayando en lo tenebroso se maquina al interior del Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET).
Los principios de imparcialidad, certeza, legalidad, independencia y objetividad de las elecciones están en riesgo de ser vulnerados por el organismo “autónomo” que desde el 1 de marzo pasado encabeza el cuestionado magistrado Miguel Nava Xochitiotzi.
No se lo diga a nadie porque es ultra secreto, pero ya corren versiones de que el jurista originario de Contla de Juan Cuamatzi ha puesto al servicio del mejor postor su firma para que varias de las casi 100 impugnaciones tengan resoluciones a modo.
El magistrado que en 2020 fue demandado en dos ocasiones ante la Comisión Jurisdiccional del Senado de la República (la primera por exceso en sus funciones e incurrir en actos y omisiones que atentan contra el buen despacho del encargo y, la segunda, por presuntos actos de corrupción, porque indebidamente y por medio de falsedad de declaraciones trató de cobrar al TET el reembolso de 17 mil 760 pesos por una póliza de seguro de un automóvil que bajo su resguardo sufrió un accidente en el estado de Veracruz durante días considerados como festivos por la celebración de Día de Muertos), ha comenzado a sacar el cobre al ser señalado de pretender cobrar sus determinaciones jurídicas.
De esas aseveraciones presumiblemente no escapan las otras dos ponencias que encabezan la expresidenta del TET, Claudia Salvador Ángel y el magistrado por ministerio de ley y expresidente por unos cuantos días, Lino Noé Montiel Sosa.
Y es que no se trata de ser adivino, basta con observar a qué magistrado le cae cada impugnación para evidenciar que existen intereses muy por debajo de cada expediente.
No sólo eso, los señalamientos de presuntos actos de corrupción van más allá porque el exmagistrado y expresidente del TET, Luis Manuel Muñoz Cuahutle, está más que metido en la defensa de impugnaciones de varias alcaldías, entre ellas Huamantla y Tetlatlahuca, para lo cual usa como fachada de su despacho a Rigoberto Lucas López, exdirector Jurídico del Congreso local, así como a funcionarios del organismo que en su momento ingresaron a la nómina, entre ellos Juan Antonio Carrasco.
Para muchos juristas electorales no son desconocidos los antecedentes de Miguel Nava Xochitiotzi, de ahí que si el magistrado cae en la tentación de tirar una elección, corre el riesgo de que la Sala Regional Ciudad de México o la Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le enmienden la plana al corregirle el sentido de sus sentencias y, por consiguiente, sería sometido a juicio político, pues por ganas no pararán los próximos diputados locales de mayoría morenista.
La situación es sencilla, el TET no le puede apostar a “voltear” los resultados de ciertos municipios, diputaciones locales o presidencias de comunidad porque, les guste o no, en Huamantla ganó Salvador Santos Cedillo y en Axocomanitla triunfó Gabriela Hernández Montiel, por citar dos ejemplos.
Por si los magistrados tlaxcaltecas lo olvidan, la Sala Superior ha sido clara al decir que en los procesos electorales debe prevalecer la voluntad ciudadana bajo cualquier vía, el principio de conservación de los actos públicos válidamente celebrados y, en pro de eso, si hubiera una quema de urnas (como ocurrió) se debe reconstruir la voluntad a través de actas y de sábanas para que no quede duda que no basta quemar boletas para que sea declarada nula.
El caso del Distrito 15 es otra afrenta para el TET porque, insisto, les guste o no, Ana Bertha Mastranzo Corona ganó democráticamente, aunque sea por un margen de 11 votos.
De otros actos de parcialidad con que presuntamente se conduce el TET y su cuestionada conformación, luego hablamos pues en esa oficina hay mucha maraña por desenredar.
GRAVE ACUSACIÓN
El que acusa está obligado a demostrar y la seria imputación que lanzó el representante de Morena ante el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) debe ser investigada y, de ser cierta, castigada.
“Lamento mucho que desde el seno del instituto electoral, a través de funcionarios, salieran llamadas a los candidatos de Morena para extorsionarlos, que a través de dicha cantidad se verían favorecidos con regidurías”, expresó en la sesión del pasado sábado el exconsejero y hoy defensor morenista Dagoberto Flores Luna.
“Yo le solicitaría que nos haga llegar las evidencias a la brevedad para que se inicie la investigación necesaria y, en su caso, proceder en consecuencia de ser cierto, pues es inadmisible que eso esté sucediendo y evidentemente nosotros no tenemos conocimiento y desde luego no es una situación que nosotros podamos tolerar”, reviró el presidente del ITE, Emmanuel Ávila González.
Si el hecho se confirma será una gran mancha que marcará el proceso electoral 2024, pero si no es así, Dagoberto Flores quedará marcado como un vil mentiroso que únicamente buscó reflectores para manifestar su inconformidad por la distribución de regidurías que mayoritariamente favorecieron a mujeres en los 60 ayuntamientos.
CONSENTIDO
¿De qué beneficios gozará el exalcalde de Chiautempan, Héctor Domínguez Rugerio?
Y es que a diferencia de Eymard N. e Hildeberto N., enfrenta su proceso legal por peculado desde la comodidad de su casa.
El exmunícipe de extracción priista debería estar en la cárcel, pero una argucia legal al argüir un problema de visión lo han convertido en una persona con discapacidad y de ahí el argumento de sus abogados para no ser refundido detrás de unos barrotes por su presumible corrupto actuar como alcalde del municipio textilero.
ADIVINA ADIVINADOR...
¿Quién le hará sus discursos a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros?
Mire que eso de confundir al presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política, Jorge Caballero Román con el diputado con licencia, Miguel Ángel Caballero Yonca, habla de un error garrafal.
Lo anterior penosamente ocurrió durante la develación de las letras doradas del Instituto Politécnico Nacional en el Muro de Honor de la Salón de Plenos del Palacio Juárez.
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