En el marco del Día Internacional de la Mujer, la ONU invita a conmemorar con un lema fuerte e inclusivo: "Igualdad de género hoy para un mañana sostenible". Bajo esta idea, la ONU reconoce la contribución de las mujeres y las niñas de todo el mundo, que están liderando los esfuerzos de respuesta, mitigación y adaptación al cambio climático para construir un futuro más sostenible para todas las personas. Los aspectos relacionados con el cambio climático y la sustentabilidad han tenido y seguirán teniendo consecuencias graves y duraderas en nuestro desarrollo social, económico y medioambiental.
El cambio climático y la sostenibilidad continuarán teniendo graves consecuencias en el desarrollo de las sociedades, la economía y el medio ambiente, a su vez, las personas más vulnerables son quienes padecen aún más sus efectos, cada vez es más evidente que las mujeres son más vulnerables al impacto del cambio climático que los hombres, ya que constituyen la mayoría de la población pobre del mundo y son más dependientes de los recursos naturales que están bajo la amenaza del cambio climático.
Las mujeres y las niñas sufren más el impacto de la crisis climática ya que ésta amplifica las desigualdades de género existentes y pone la vida y los medios de vida de las mujeres en peligro, en todo el mundo, las mujeres dependen más de los recursos naturales, tienen menos acceso a ellos y, a menudo, asumen una responsabilidad desproporcionada como encargadas de asegurar el suministro de comida, agua y combustible.
También es cierto que las niñas y mujeres son líderes eficaces y poderosas que impulsan el cambio, ellas crean, forman parte y se implican en iniciativas sostenibles que impactan en todo el mundo, generando una acción más eficaz por el clima, en pos de un mayor desarrollo sostenible y una mayor igualdad de género, es vital continuar generando oportunidades y conocer las limitaciones con las que se encuentran en su día a día, ser conscientes de estos puntos permitirá que puedan alzar su voz y continuar luchando por igualdad en los distintos ámbitos y en la toma de decisiones relacionadas con el cambio climático, sin igualdad de género hoy, el futuro sostenible e igualitario seguirá estando fuera de nuestro alcance.
Dar a las mujeres un mayor acceso a los recursos productivos puede elevar la producción agrícola, reforzar la seguridad alimentaria y reducir las emisiones de dióxido de carbono, si todas las pequeñas agricultoras tuvieran las mismas oportunidades de acceso a los recursos productivos, su producción agrícola aumentaría entre un 20 y 30 % y, por ende, de 100 a 150 millones de personas dejarían de pasar hambre, aumentar la producción agrícola puede llevar a disminuir la presión por deforestar más tierras, lo que reduciría más emisiones de dióxido de carbono.
El liderazgo de las mujeres está asociado con una mayor transparencia en torno a los efectos del cambio climático, un porcentaje más alto de se relaciona de manera positiva con la divulgación de información sobre las emisiones de dióxido de carbono.
Para llevar a cabo una acción colectiva eficaz contra el cambio climático, deberemos realizar grandes cambios en cómo producimos y medimos el valor económico, abandonar las prácticas de explotación masiva de los recursos naturales y las economías basadas en los combustibles fósiles representa una oportunidad para crear nuevas fuentes de trabajo y capacitar a las trabajadoras para que adquieran nuevas habilidades, aumentar las inversiones en el sector del cuidado es una manera eficaz de dirigir la atención hacia el bienestar colectivo y fortalecer las economías sin generar más emisiones de dióxido de carbono.
Impulsando la inversión y la acción global centradas en financiar soluciones climáticas con justicia de género, aumentar el liderazgo de las mujeres en la economía verde, mejorar la resiliencia de las mujeres y las niñas a los desastres y los impactos climáticos e incrementar el uso de los datos sobre igualdad de género y clima.
Poner la igualdad de género en el centro de las soluciones al cambio climático significa integrar las distintas perspectivas de género en las políticas y programas holísticos y duraderos relativos al clima, el medio ambiente y la reducción del riesgo de desastres, la participación plena e igualitaria de las mujeres y las niñas en los procesos de toma de decisiones es una de las principales prioridades en la lucha contra el cambio climático, sin igualdad de género, hoy es imposible construir un futuro sostenible y más igualitario.
Las soluciones climáticas deben adoptar un enfoque de financiación que tenga en cuenta las cuestiones de género, las iniciativas dirigidas por mujeres deben contar con financiación suficiente y equitativo a fin de lograr una transición justa y ecológica.
Para forjar un futuro más sostenible, debemos invertir en difundir tecnologías que aumenten el uso de las energías renovables y limpias, y apoyen la participación de las mujeres en su desarrollo y uso, se debe reconocer, aplaudir, publicitar y animar a las valientes mujeres que constantemente han defendido y promovido medidas de acción equitativas, justas y con perspectiva de género por el clima.