Elegantes y con vestidos color blanco, Brenda Karin y Ximena Mayte Nava realizaron su primera comunión en el Exconvento de San Francisco, donde fueron acompañadas por sus madrinas, Guadalupe Nava y Azucena Carcaño, quienes atentas escucharon las palabras del sacerdote que ofició la misa.
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Después de la Eucaristía, las nuevas comulgantes, se acercaron al altar del Todo Poderoso para agradecer, por llegar a este día y recalcar su devoción por la Iglesia Católica.
Más tarde, en su domicilio, esperaron a sus invitados para ofrecerles una comida que con gusto sus seres queridos prepararon, para dar gracias a quienes acompañaron a este par de niñas, que disfrutaron de un día lleno de alegría, sorpresas y de visitas inesperadas que recibieron con cariño.
La tarde transcurría y la alegría brillaba entre estas dos jovencitas, bailaron, jugaron y convirtieron este festejo de esplendorosa algarabía al lado de sus familiares y amigos que también las acompañaron y las felicitaron.
Llegó el momento del brindis, y los anfitriones de la convivencia familiar, agradecieron a sus hoy comadres, por haber acompañado a sus hijas al altar para que comulgarán por primera vez, sin dejar a tras a sus invitados que también fueron participes de evento.
Antes de terminar la fiesta, las homenajeadas, realizaron una sesión de fotos, para lucir sus esplendorosos vestidos y enmarcar este día especial.
Posteriormente, los asistentes les cantaron “Las Mañanitas” y luego cortaron un pastel, en este momento una lluvia de serpentina y globos de color blanco y rosa, cayeron hacia los invitados, espectáculo que emocionó a todos.
Brenda Karin y Ximena Mayte son hermanas, este par de chicas son totalmente diferentes, sus personalidades son diversas pero las dos tienen una cosa en común, son entrañables.
Una lució más juvenil con un vestido medio escotado y a la rodilla. Mientras que otra, un vestido largo con vuelo que se vio como una princesa. Ambas son carismáticas y agradecieron el esfuerzo de sus padres para hacer de esta fiesta bonita y de ensueños.
- Las madrinas, Guadalupe Nava y Azucena Carcaño, se comprometieron a guiar a las pequeñas por el sendero del bien
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