Doña Rubí Montejo celebró su cumpleaños 56 en compañía de su querida familia, quien la llenó de muchas sorpresas, además de que disfrutó la presencia de sus nietas que no veía hace mucho tiempo.
La fiesta fue sorpresa, no se imaginó que su hija mayor Guadalupe, le había organizado una convivencia con su más cercana familia. A temprana hora, la anfitriona adornó el lugar de la fiesta con globos y flores, mientras que la cumpleañera como todos los días se arreglaba, sin imaginar que este sería especial.
EL FESTEJO
En punto de la hora de la comida fueron llegando los invitados, con regalos y uno que otro pastel, otros con flores, ya que a la festejada le encantan las rosas de color rojo.
Después llegó su sobrino José Raúl Castellanos Ricárdez acompañado de su guitarra, para cantarle las “Mañanitas” a su consentida tía Rubí, a quien le deseó lo mejor en este nuevo año de vida y le recordó lo importante que es en su vida.
Más tarde, la anfitriona agradeció el cariño que le tienen a su querida mamá, dijo que hubiera querido reunir a sus demás familiares y amigos, pero las circunstancias no lo permiten, pero que será el próximo año si Dios quiere, que vuelvan a estar juntos como lo ha sido siempre en las convivencias de sus seres queridos.
Después de una amena charla, la cumpleañera cortó su pastel, pero antes pidió su deseo y se tomó las fotos del recuerdo con sus invitados y en especial con sus nietos, a quienes dijo quiere mucho y agradeció el que hayan estado presente en este día especial para doña Rubí que no esperaba que le festejaran su onomástico.
No dejes de leer: