Pistache, vainilla, café, chocolate, limón, guanábana y coco, son algunos de los sabores tradicionales de helados y nieves que se elaboran en Dolores Hidalgo, Guanajuato, un Pueblo Mágico en el que todo viajero que quiera conocerlo, debe hacerlo a través del gusto; ya sea en los establecimientos que venden en el jardín principal o directamente en su joya más preciada: los helados finos de La Flor de Dolores.
Asomarte a esta nevería te pone de buenas al instante, es una fiesta de vivos colores. Ver las opciones en los refrigeradores, causa ansiedad en personas de todas las edades.
Desde los años 70, La Flor de Dolores se caracteriza por rescatar la tradición de elaborar nieves con el proceso más apegado a las recetas originales. Cada sabor, lleva ingredientes de alta calidad, técnicas artesanales y limpieza que permiten resaltar sus propiedades y aromas.
La familia García Moncada está detrás de la historia del establecimiento; ha participado en varios concursos de helados finos y novedosos y ¿qué crees? ha ganado reconocimientos nacionales e internacionales; por ejemplo, el “Meninas”, un premio otorgado en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) que se realiza en Madrid. La delicadeza de estos helados fue condecorada por los Reyes de España, durante la cena de gala de la Casa Real en donde el postre corrió a cargo de la Flor de Dolores.
“Colibrí” es otra deliciosa nieve combinación de frutos de tres cactáceas que ganó el premio dentro de la Feria de la Nieve que se llevó a cabo en el 2010, en Dolores Hidalgo.
Uno de los secretos mejor guardados, es la creación de nieves hechas a partir de los frutos de cactáceas de la región como: la borrachita, obtenida de la biznaga; el garambullo, la tuna reina y el xoconostle, una fruta desértica que, con un poco de tequila, se le conoce como nieve “José Alfredo Jiménez”, homenaje al cantautor originario de Dolores Hidalgo.
En su amplia carta, también encontrarás la nieve de vino de uva Cavernet Sauvignon, para promocionar los vinos Cuna de Tierra, casa vinícola de la región; además, sabores preparados especialmente para diabéticos. Y si deseas aprender a preparar nieves y helados de manera artesanal, la Flor de Dolores realiza talleres para una experiencia integral con los viajeros.
Hay mucho qué descubrir en estos helados, pero sobre todo, muchos sabores qué probar; una decisión difícil, más cuando se trata de una heladería con gran trayectoria; lo recomendable es pedir más de una prueba para finalmente elegir el sabor de tu preferencia.