Entre amigos, en pareja y en familia vivieron los aficionados de la fiesta brava, en la 64 edición de la tradicional Huamantlada, como parte de los festejos anuales en honor a la Virgen de la Caridad.

Vestidos de mezclilla, sobreros y pañoletas rojas, miles asistieron a la celebración que dio inicio desde las primeras horas del sábado en las principales calles de Huamantla.

Previo al estallido del tercer cohetón que anunciaba la liberación de los astados, los visitantes aprovecharon para comprar los accesorios del día, como sombreros, gorras, peluches de toritos y las botas para el vino; mientras que otros prefirieron degustar los tradicionales antojitos mexicanos.

Locales y nacionales disfrutaron al máximo de la fiesta brava, como Dalia y Alberto, de la Ciudad de México, quienes llevan dos años consecutivos visitando en estas fechas el pueblo mágico.

Por su parte, Alexa y Damián, originarios de Huamantla, comentaron que se sienten orgullosos de las festividades, que son referentes a nivel nacional, no obstante, señalaron que debería estar más regulada la venta y consumo del alcohol.

Este año, 17 toros de casta corrieron por los circuitos causando emoción y adrenalina de los que solo miraban desde los burladeros y a los valientes que ponían a prueba sus habilidades como toreros de ocasión.

Durante una hora, los olés y el jolgorio en los burladeros no pararon ante el espectáculo que se daba en los distintos circuitos. Una vez finalizada la Huamantlada, el mar de gente invadió los puestos ambulantes de comida, restaurantes y bares, quienes siguieron la fiesta antes de continuar con la corrida en la Plaza de Toros de la ciudad.

17 toros fueron liberados en los circuitos

Antes nos contaban de este evento aquí en Tlaxcala, por eso decidimos vivirlo en carne propia y este es nuestro segundo año viniendo (…) nos gusta porque se asemeja a la pamplonada de España… pero con más sabor

Alberto / Visitante originario de la Ciudad de México