Una vez más, San Pedro Tlalcuapan iluminará sus calles para sorprender a los más de 150 mil visitantes que espera para esta novena edición. Los festejos navideños iniciarán a partir del 6 de diciembre con el encendido del árbol y un baile popular.
Posteriormente, el 16 de diciembre se llevará a cabo el tradicional desfile en el que se espera la participación de poco más de 100 carros alegóricos, así lo precisó Raymundo Cahuantzi Meléndez, presidente de comunidad en turno.
Dio a conocer que serán siete kilómetros de adornos navideños que se tienen preparadas en las fachadas de las casas de esta población; además de los impresionantes pesebres armados en varios hogares como parte de una tradición familiar.
SINCRETISMO POPULAR
Desde hace 40 años, los hogares ubicados al pie de la Malinche han recreado un escenario cultural de dos países (Estados Unidos y México), cuya mezcla de elementos ha logrado llamar la atención de locales y nacionales.
Sin importar el intenso frío, miles de turistas han acudido, año con año, a la localidad para visitar los hogares de quienes se esmeran para impresionar con extraordinarios nacimientos.
Tal es el caso de Juan Meléndez y su familia, quienes desde dos semanas antes, inician con los preparativos del pesebre, uno de los más visitados por su ingeniosa idea de representarlo con animales vivos.
Chivos, borregos, totoles, gallinas, burros, caballos y hasta un búho forman parte del nacimiento que rinde veneración al niño Jesús.
Para la realización de este belenismo se le invierten alrededor de 12 mil pesos, entre luces, adornos, música y demás, eso sin contar la luz corriente, detalló Juan en entrevista para este medio.
Ante dicha situación, Meléndez agregó que en su hogar venden distintos aperitivos que van desde chalupas, tlacoyos, pan de dulce, café y ponche para recuperar parte de la inversión.
Hasta el momento no hemos pensado cobrar la entrada a la gente que nos visita, porque es una tradición que nos gusta compartir. Con lo que logramos vender es suficiente para cubrir parte de los gastos, mencionó Juan.
TRADICIÓN
De acuerdo con algunos vecinos del lugar, esta tradición (adaptación de costumbres “gringas”) se originó hace cuatro décadas tras la migración de habitantes hacia Estados Unidos, hecho que aún se registra.
Actualmente, un aproximado del 40% de la población de Tlalcuapan radica en el país norteamericano, hecho que genera una mezcla de costumbres.
EL PESEBRE MÁS PEQUEÑO DE TLAXCALA
Forma parte de los 40 belenismos miniatura de la familia Zontlimatzi, en San Pedro Tlalcuapan
Sobre la calle Reforma, en el domicilio marcado con el número 19, se ubica el nacimiento más pequeño de San Pedro Tlalcuapan, comunidad de Chiautempan.
Su diminuto tamaño, de escasos cinco centímetros, expone detalladamente a Jesús, María, José y los tres Reyes Magos.
La artesanía elaborada en media cáscara de pistache es la más popular entre los 40 belenismos miniatura de la Familia Zontlimatzi Mixcoatl. Cada uno de ellos representa pasajes bíblicos, desde Génesis hasta la resurrección del Mesías.
Daniel Zontlimatzi, historiador y precursor del atractivo, precisó a El Sol de Tlaxcala que cada uno de los pesebres conformados por piezas de diferentes materiales, son producto de manos artesanas de varias partes del país, incluyendo Tlaxcala.
El nacimiento en pistacho fue hecho en una comunidad serrana de Veracruz. Abundó que cada año, los belenismos son escenificados al aire libre, en un jardín con más de 50 especies de plantas.
Los recorridos, de aproximadamente 15 minutos, son guiados por sus hijas Daniela y Renata, de 11 años de edad, e iniciarán a partir del 16 de noviembre en un horario de 19:00 horas a 23:00 horas.
Cabe mencionar que al final de recorrido, los visitantes podrán degustar de antojitos mexicanos y de temporada elaborados especialmente por la familia.
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