Si eres un apasionado de la lucha libre y quieres vivir de cerca la experiencia de conocer la vida y trayectoria de uno de los ídolos mexicanos más destacados de los años 50, el Museo de El Santo es para ti.
En el municipio que vio nacer a este ídolo mexicano, Tulancingo, Hidalgo, se ubica el museo que exhibe más de 200 piezas alusivas a este héroe de carne y hueso.
En el recinto conocerás documentos personales de “El enmascarado de plata”, podrás ver una máscara de metal hecha y donada por el escultor José Sacal.
De igual modo, podrás conocer la escultura de la “llave de a caballo”, carteles de películas referentes a los 52 filmes que hizo, fotografías, documentos, historietas y proyecciones de cintas en un mini cine.
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Felipe Carrillo Montiel, director de Museos, calificó la exposición como una especie de libro abierto en el cual la gente puede conocer diferentes facetas, desde la vida personal de Rodolfo Guzmán Huerta, su familia, sus hijos, su esposa, hasta algunos pasajes de su trascendencia como luchador.
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Este lugar es ideal para viajar en el tiempo y conocer gran parte de la historia de este personaje, como las 20 máscaras y 30 cabelleras que ganó durante 48 años sobre el ring, iniciando su carrera en el bando rudo y después en el técnico en 1963; o las 16 veces que fue campeón nacional e internacional, convirtiéndose en el primer campeón mundial de peso welter de México.
Conocerás también parte de las historietas que lo elevaron a rango de superhéroe, logrando vender más de un millón 650 mil copias en todo el mundo, ya que en ellas enfrentaba a momias, vampiros, extraterrestres y seres de ultratumba, al igual que en las 52 películas que protagonizó, siendo la más importante de ellas a nivel mundial “Santo contra las mujeres vampiro”.
CURIOSIDADES
¿Sabías que El Santo no solo fue luchador profesional y superhéroe? En el museo que le rinde homenaje existe un espacio donde se revela que también fue beisbolista, cantante, torero, escapista y empresario. Tuvo una vocación altruista, ya que mucho de lo que ganó lo donó para ayudar a casas de adultos mayores, de infantes enfermos, de personas de escasos recursos y daba funciones gratuitas a las personas privadas de la libertad.
El museo fue construido en una de las antiguas bodegas de la estación del Ferrocarril Tulancingo el 23 de septiembre de 2009 y ha tenido varias remodelaciones, ya que es uno de los principales atractivos turísticos de esta ciudad.
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Varios artistas han donado algunas piezas, como la de José Sacal, y obras de arte que llegaron al museo para conmemorar 100 años del natalicio de El Santo, en 2017, mediante una convocatoria entre pintores nacionales e internacionales, siendo 56 obras de arte que continuamente son exhibidas.
Y YA QUE ESTÁS EN TULANCINGO
Aprovechando tu visita al municipio del “El enmascarado de plata”, no debes perder la oportunidad de recorrer el Corredor Cultural de los Museos que se ubica en la antigua estación del Ferrocarril de Tulancingo, en la calle Matamoros de la colonia Ferrocarrilera.
Tu recorrido puede continuar el Museo del Ferrocarril, seguir por el Vagón cafetería del DIF, la Cineteca Tulancingo, visitar el Monumento a El Santo, así como el Museo de Datos Históricos, el Archivo Municipal y concluir en los parques El Caracol y Gabriel Vargas.
Tulancingo es para pasarse un fin de semana excelente: tenemos muchos atractivos, buenos hoteles, buenos restaurantes. Estamos cerca de la Ciudad de México, cerca de Arco Norte, comunicados con muchas ciudades, refirió Carrillo Montiel.
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QUÉ COMER Y DÓNDE HOSPEDARSE
El Vagón Cafetería DIF, que está justo enfrente al Museo de El Santo, es la mejor opción para que pruebes el tradicional “guajolote” de Tulancingo, antojitos mexicanos y otro tipo de platillos. Se trata de un antiguo vagón de tren que fue adaptado como cafetería y donde tienes la comodidad para también, leer un buen libro, tomar un café y jugar ajedrez.
En cuanto al hospedaje, Tulancingo cuenta con 20 hoteles de diferentes categorías, entre todos cuentan con 706 habitaciones; los más cercanos al Museo de El Santo son: El Colonial, el Americano, el VM, Esfera, Inglés, Mediterráneo, y el Hidalgo, con habitaciones que van desde 300 hasta mil 500 pesos por noche, dependiendo de los servicios y el número de estrellas.
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QUÉ PROBAR
El Vagón Cafetería DIF, que está justo enfrente al Museo de El Santo, es la mejor opción para probar el tradicional guajolote de Tulancingo.
Felipe Carrillo Montiel, Director de Museos
“Tulancingo es para pasarse un fin de semana excelente: tenemos muchos atractivos, buenos hoteles, buenos restaurantes. Estamos cerca de la Ciudad de México, cerca de Arco Norte, comunicados con muchas ciudades”
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ACCESO
La entrada al Museo del Santo es gratuita, abre de martes a sábado de 9 am a 7 pm y domingo de 10 am a 6 pm. El acceso es gratuito.
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