Total hermetismo existe por parte de Eduardo Emilio VelázquezGallegos, delegado del Instituto Nacional de Antropología eHistoria (INAH) en Tlaxcala, respecto al reportaje que publicóeste Diario sobre el olvido por parte del INAH de las pinturasrupestres, ubicadas en los límites entre el municipio de Amaxac yla comunidad de Atlihuetzia, Yauhquemehcan, las cuales están en untotal abandono, no poseen seguridad, es imposible el acceso yestán a punto de desaparecer.
A este caso se suma la reciente demolición de una casona quedataba del siglo XIX, ubicada en Calpulalpan, y de la que tampocoVelázquez Gallegos dio declaración alguna a pesar de habersecomprometido a dar una postura al respecto, pese a que son asuntosde la competencia de la delegación del INAH en Tlaxcala.
La única respuesta se dio a través de la recepcionista dedicho Centro INAH, quien indicó que se emitiría un comunicado deprensa por parte de la institución con sede en la Ciudad deMéxico.
Es importante destacar que, el caso de Calpulalpan, es elsegundo durante la administración del actual delegado dondepobladores derriban un edificio antiguo sin dar parte al instituto,pues cabe recordar que, el año pasado, específicamente en julio,fue demolida la Capilla del Santo Cristo, de la localidad deVicente Guerrero, en el municipio de San Pablo del Monte, asuntoque trascendió al plano jurídico, pues, el bien, catalogado einscrito en el Registro Público de la Propiedad Federal con folioReal 15609, databa del siglo XVIII.