Las personas con discapacidad no tienen límites en la creación artística y, por lo tanto, con su trabajo muestran la vida desde su perspectiva; bajo esta premisa surgió el proyecto Laboratorio de lo Invisible, que acompaña a este grupo de la población en la generación de obras audiovisuales y de narrativas a partir de lenguajes de señas y expresiones gestuales.
EL PROYECTO
Desde el 2017, "Laboratorio de lo Invisible" ha recorrido diversos estados, como Puebla, Oaxaca, Jalisco y Guanajuato, para brindar a personas con discapacidad las herramientas para el desarrollo de cortometrajes que presentan las historias que hablan de ellos mismos, de sus vivencias y anhelos.
Entérate:➡️Jóvenes sordos se desarrollan en danza
Este proyecto llegó a Tlaxcala con el respaldo de la Secretaría de Cultura estatal, por lo que personas de la comunidad sorda en la entidad participaron en un taller de visual vernacular, concepto que se refiere a un estilo de narración que permite a las personas sordas construir una historia a través de lenguaje de signos, técnica de mimo, gestos y expresiones faciales.
Los participantes tlaxcaltecas formaron parte de un taller virtual y posteriormente una sesión presencial en la Casa de Música, donde practicaron desde distintos lenguajes las posibilidades de generar una narración en la que ellos son los protagonistas.
Lee también:➡️En Puebla, seis proyectos fueron construidos por Grupo Sordo Madaleno
REALIZAN CORTOMETRAJES
En una plática con este Diario, Moisés García Rojas, integrante de "Laboratorio de lo Invisible", enfatizó que las narrativas actuales que vemos en el arte y en los medios de comunicación se centran principalmente en las personas que no tienen algún tipo de discapacidad, dejando de lado a estos grupos quienes escasamente tienen la posibilidad de contar historias desde sus perspectivas; por ello surgió la idea de este proyecto para ayudar a este grupo a generar sus propios contenidos y mostrarlos a la sociedad.
Los cortometrajes son realizados con herramientas básicas y accesibles como un teléfono celular para la grabación pues, más allá de los aspectos técnicos, lo fundamental es el contenido de cada producción, aquello que se quiere compartir con los demás, basadas en el respeto a las diferencias como menciona Moisés García.
No dejes de leer:➡️Presentan 10 niños sus cortometrajes en Contla
El integrante de "Laboratorio de lo Invisible" asegura que estas producciones son la muestra de que una discapacidad no es una limitante, pues al ver los resultados es visible la calidad de estos trabajos. De hecho, los cortometrajes elaborados desde este proyecto han formado parte de festivales como es el caso del festival chileno “Todos somos diferentes” y en el Festival Cervantino, en su edición 2018.
Las actividades se desarrollaron en la Casa de Música en la ciudad de Tlaxcala, bajo la dirección del especialista en lenguaje de señas Alejandro Palma.
LEE MÁS:⬇️