Esta es la historia de un adolescente de 15 años que una tarde escapó de su trabajo para pasar rápido a Comic Castle, con el único propósito de ir a hojear cómics. En su camino se atravesó un letrero: “Se solicita dibujante.” Y su vida cambió. Hoy, a sus 36 años, Raúl Valdés ya fue pionero del webcómic mexicano y es un importante exponente del cómic en nuestro país.
A pesar de que su trabajo no era lo que buscaban en ese momento, Raúl aceptó la invitación a permanecer cerca, y pronto comenzó a conocer a los dibujantes que reunían los viernes para comprar los cómics recién llegados a la tienda. Fue en una de esas ocasiones que conoció al chico que le ofreció su primer trabajo en publicidad como asistente de storyboardista en Lowe Lintas.
Su paso por la publicidad ha definido mucho su carrera como dibujante, pues la disciplina la aprendió en jornadas de hasta cuatro días seguidos en la oficina para cumplir con deadlines, y a pesar de los matices de explotación, Raúl disfrutaba estar haciendo lo que más le gustaba hacer: dibujar. La red de apoyo que nació de las tardes en la tienda de cómics le colocó en una segunda posición dentro de la publicidad, ahora como asistente de arte, y fue ese el momento en el que Raúl decidió que se iba a dedicar a la creatividad el resto de su vida.
“A mí la publicidad me enseñó lo que necesitaba para hacer cómics y hacer del pensamiento creativo algo que fuera palpable.”
Raúl afirma esto a través de su experiencia y en ningún momento se arrepiente de no haber tomado un campo de formación académica formal. Habla entonces del cómic como un oficio que se realiza y se aprende de manera artesanal. La publicidad fungió como maestra de la disciplina y la narrativa, elementos que han sido indispensables al momento en que Raúl elabora un cómic y busca vinculares con sus lectores.
En 2006, cerca de una década después del inicio de su carrera, fue que Raúl, junto con Óscar Amador, publican en línea Living with Shine, el primer webcómic mexicano gestado en una internet de neófitos que vivían virtualmente ahí por puro placer y muy lejos de la capitalización que representa ahora.
Esta idea obedeció a la complejidad que representaba entonces el publicar y distribuir cómic mexicano. Raúl describe al proyecto como un experimento inevitable para satisfacer su enorme necesidad de crear algo, y como tal implicaba retos y no garantizaba nada.
El experimento exitoso resultó en el primer webcómic reseñado en Newsarama, un medio en línea especializado en cómics a nivel mundial.
A otros 10 años de distancia, Raúl se ha dediado al cómic de tiempo completo, como era su meta. Ha ganado la beca del FONCA para jóvenes creadores en dos ocasiones, la primera en 2014 con el proyecto de Amoxcalli Comics y una historia que se desarrolla en torno a las leyendas mexicanas; y la segunda y más reciente con un cómic sobre las costureras atrapadas tras el terremoto de 1985 en la Ciudad de México. Su paso por Marvel lo involucró con las publicaciones de Xtreme X-Men, Atonishing X-Men y X-Termination Omega. Actualmente se encuentra colaborando con Evil Dead, atendiendo también trabajos como ilustrador.
