DON PETROS: Veterano apizaquense que cumple 48años en el oficio de fígaro
“Los maestros peluqueros nos hacen menos feos, más limpios ycon menos años, por eso cada mes aquí estoy”, expresó ÁngelBarrientos, un veterano avecindado en Tlaxco, exfuncionario en elsexenio de Beatriz Paredes Rangel, quien acudió a la peluquería“Gran-Chez” propiedad de Petronilo Sánchez Ruiz.
En la víspera del ‘Día del Peluquero’ que se celebra estedía, el propietario de este negocio –se ubica en el primercuadro de la ciudad de Apizaco- don Petros como lo conoce la clasealta, media y baja, ni siquiera sabe que el 25 de agosto se celebraa quienes se dedican a la peluquería.
-Don Petros, ¿dónde aprendió este oficio? pregunta elcliente de pelo cano, al propietario de lapeluquería.
-Frente al Parque Cuauhtémoc estaba la Peluquería“Francis”, el dueño era don Ignacio de la Cruz Hernández,entonces era un chamaco de 13 o 14 años, era el mandadero, peropoco a poco aprendí.
En la plática, relató que mientras el patrón del negociojugaba los naipes con sus amigos de parranda, él aprendía deotros peluqueros el arte de la tijera.
Expuso que bajo los consejos e instrucciones de los fígaros, enmenos de un año aprendió el arte de cortar el pelo a los hombresy niños, empleo con el que mantiene a la fecha a su familia.
Es más, manifestó que “aprendí la peluquería y de esoquiero retirarme, cuando ya no tenga fuerzas en las manos o cuandola vista ya empiece a perderla”.
No obstante, comentó que al inicio el dinero que ganaba comooficial le alcanzaba para sostenerse, mientras no se casaba, puescada corte se lo pagaban en cuatro pesos.
Incluso, presumió que resultado de su empleo que tenía, lepermitía vivir cómodamente y hasta se daba el gusto de visitarcentros nocturnos como “El Flamingo” o el “XX”, negociosque décadas después desaparecieron.
Don Petros dijo que fue al inicio del año 2000 cuando decidióindependizarse e instalar su propio establecimiento en el municipiode Apizaco.
“Dejar a mis maestros peluqueros me costó, pero el dinero yano me alcanzaba para mantener a la familia, así que me decidí yles dije que comprendieran, que quería emprender un negocio a minombre”, manifestó.
Resaltó que inicialmente optó por ponerle a su peluquería“Norma”, en honor a su hija que le seguía los pasos en esteoficio, hasta que aprendió.
El barbero refirió que como siempre había trabajado en unapeluquería, perdió algunos clientes, porque entraban mujeres,así que, “una vez que mi hija y mi yerno instalaron su propionegocio a las afueras de la ciudad, decidí cambiarle elnombre.
Explicó que el nombre de “Gran-Chez” es una abreviatura deGrande y Sánchez, los apellidos paternos de su esposa y él.
Y mientras la plática continuó, la clientela siguió llegando,pues el inicio del regreso a clases es de mucho trabajo y porminutos la peluquería se convirtió en un jardín de niñosvaronil.
Ahí, el negocio también es atendido por los fígaros Reynaldo,Vidal, Gregorio y Arturo, todos sus discípulos. Arturo García esel más inquieto y el que quiere aprender más rápido.
“Tengo 25 años, pero empecé a los 17, le hice el pelo alpresidente municipal de San José Teacalco y a su jefe, él esamigo mío, hasta de parrandas”, expresó.
Comentó que en la peluquería falta algo cuando no está enmanos de los clientes el periódico El Sol de Tlaxcala.
Don Petros subrayó que en este oficio el “sol sale para todosy así como algún día me aventuré a poner mi peluquería, asíle hacen muchos que llegan y se llevan los clientes… lo que sedebe aprender es que, la amistad nunca se debe perder”.
El peluquero mencionó que diariamente corta el pelo a unas 20personas entre los que destacan: comerciantes, taqueros, boleros,policías, limosneros, alcaldes y hasta cantantes como JorgeDomínguez.
Eso sí, aclara que el corte de pelo es solo para 20 días si esque los hombres quieren verse menos feos y más limpios.