Nuevas plumas tlaxcaltecas: Destacan jóvenes en los Premios Estatales de Literatura 2024

Los escritores plasman en sus obras las inquietudes y reflexiones de una nueva generación

Karla González / El Sol de Tlaxcala

  · jueves 12 de septiembre de 2024

Ganadores de los Premios Estatales de Literatura 2024. Cortesía / Ganadores

Los ganadores de los Premios Estatales de Literatura 2024 reflejan la juventud y frescura de las nuevas plumas que se suman al panorama de las letras tlaxcaltecas.

Se trata de autores jóvenes, todos menores de 30 años, que plasman en sus obras las inquietudes y reflexiones de una nueva generación.

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Violeta Carrasco Jiménez, David Olivares López y Mónica Vargas Vázquez son los representantes de la literatura contemporánea de nuestro estado que tienes que conocer.

Violeta Carrasco ganó en Cuento. Cortesía / Violeta Carrasco

“DUÉRMETE MI NIÑO, PORQUE VIENE EL COCO Y TE COMERÁ”

Violeta Carrasco obtuvo el Premio de Cuento “Beatriz Espejo” con su obra “Duérmete mi niño, porque viene el coco y te comerá”, que reúne nueve cuentos en los que la autora juega con la idea de la infancia y el horror.

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Se trata de una obra que Carrasco escribió en diferentes temporadas de su vida, algunos de la preparatoria o de la universidad, hasta cuentos que escribió pocas semanas antes del cierre de la convocatoria del Premio.

David Olivares, ganador en Poesía. Cortesía / Daniel Olivares

“Lo interesante fue unir todos estos cuentos distintos por el tiempo, hacer que tuvieran cierto hilo o coherencia, y encontré que el hilo conductor es que hablan de la infancia desde una perspectiva de lo extraño de la infancia en escenarios fantásticos, del horror y tintes melancólicos, de lo cotidiano pero con una sensación de extrañamiento o con atmósferas de un horror de lo cotidiano”, compartió la escritora.

Violeta Carrasco continúa con la línea que ha caracterizado su producción, el horror y los miedos que se producen en la infancia, pero también agrega elementos fantásticos.

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Hay cosas relacionadas con la magia, hay un cepillo de plata que transforma a una niña en su abuela cada vez que se cepilla el cabello, también hay diálogos de un hombre con la muerte que se le aparece en su habitación”, detalló Carrasco.

Mónica Vargas, ganadora de la categoría Ensayo. Cortesía / Mónica Vargas

“Y EN EL ECO, LAS VOCES FINALES”

“Lo que quería plasmar en el texto es qué sucede tras el fin del mundo, qué sucede cuando las cosas se apagan. Es una exploración sobre el destino, sobre la obsesión por encontrar razón y respuesta, un nombre propio, una voz, y lo logra al relacionarlo con temas como los fantasmas; estamos obsesionados con el tema de la caída, el más allá y sin embargo no sabemos nada, si acaso lo que sabemos es muy poco y creo que es una confrontación con esa idea cosmogónica de el pequeño hombre que se enfrenta ante la nada”.

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Así es como describe David Olivares la serie de poemas de su obra “Y en el eco, las voces finales”, con la que obtuvo el Premio de Poesía “Dolores Castro”, primer galardón del escritor de 25 años originario de Muñoz de Domingo Arenas.

Sobre su producción poética, Olivares afirma que es el género que le hace sentir mayor soltura y comodidad al permitir la experimentación.

“En general creo que me decanto por escribir en verso por un defecto mío que es que no soy bueno narrando del punto A al punto B, cosa que requiere la prosa. La poesía permite ese salto del punto A al punto B sin intermediarios”.

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“EL EFECTO DARWIN”

Mónica Vargas logra conjuntar en su ensayo “El efecto Darwin” la literatura, la biología evolutiva y la historia de Tlaxcala con un texto que parte de la hipótesis evolutiva de Charles Darwin llamada “La reina roja”, inspirada precisamente en “Alicia en el país de las maravillas”, de Lewis Carroll.

“La premisa plantea que hay una coevolución entre especies que permite variabilidad genética, y por lo tanto la permanencia de esas especies en el medio”, explica la escritora apizaquense, quien también ha destacado en la escritura de cuento y poesía.

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A partir de este planteamiento, Mónica Vargas lanza un cuestionamiento que invita a sus lectores a reflexionar sobre su permanencia en su sociedad, en su familia, con sus relaciones de pareja, la amistad y qué tan capaces somos de permanecer en esos vínculos a partir de los cambios personales.

La idea es cuestionarse sobre qué estás haciendo en el lugar en el que estás parado, y cómo tu propia metamorfosis te está haciendo conectar con nuevas cosas y todo el tiempo está buscando esa supervivencia, a pesar del mundo alocado en el que vivimos”.

Sobre su producción de ensayo, la escritora asegura que este género le permite crear un diálogo con sus interlocutores, el cual es en sí un reflejo del diálogo interno que realizamos los seres humanos para reflexionar sobre las ideas que nos conforman.

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Con este trabajo, Vargas Vázquez obtuvo el Premio de Ensayo “Emmanuel Carballo”.

3 galardones otorgan en los Premios Estatales de Literatura: Premio de Cuento “Beatriz Espejo”, Premio de Poesía “Dolores Castro” y Premio de Ensayo “Emmanuel Carballo”