Para Roberto Murillo la imagen tiene la función de contar historias porque “es el recurso más potente que se queda en la memoria”, por esa razón desde los seis años de edad supo que la fotografía le acompañaría el resto de su vida.
Desde niño, Murillo fue un ávido observador de su contexto y consumidor de imágenes y libros que lo marcaron a lo largo de su vida y que hoy definen su vocación por la foto.
“Recuerdo que en un libro de texto de la SEP me encontré con el cuento ‘El almohadón de plumas”, de Horacio de Quiroga, y al tratarse de una narración escalofriante esas escenas se quedaron en mi mente durante mucho tiempo, al igual que unas fotografías de la revista Alarma; esos fueron uno de mis primeros contactos con la imagen y supe que la fotografía no siempre tiene que estar dedicada a algo bello, pero sí tiene que provocar emociones en el espectador”, compartió en entrevista con El Sol de Tlaxcala.
El originario de Apatatitlán cursó la carrera de Informática, pero su interés por la fotografía nunca cesó, es por ello que de manera autodidacta se preparó hasta encontrar el género que hoy más disfruta realizar, la fotografía documental.
“Fue en un taller del fotógrafo Mariano Aparicio, especializado en fotografía documental, que casualmente encontré el estilo que mejor de adapta a mi concepción de la fotografía. Recuerdo que para entrar a este taller presenté unos trabajos sobre luche libre y una vez seleccionado la instrucción fue elaborar un documental en imágenes sobre algo emblemático de Tlaxcala, que después formaría parte de una exposición, lo cual fue un gran reto para mí”, explicó.
Como resultado de este taller, el fotógrafo creo la serie “Vínculos de Piloncillo”, con la que mostró una de las tradiciones más representativas para Tlaxcala: la elaboración de muéganos a cargo de Don Miguelito, uno de los mayores representantes de esta actividad. Esta exposición le valió el reconocimiento a Murillo.
“Con este trabajo me di cuenta que más allá de la técnica o el equipo adecuado lo importante es la sensibilidad del fotógrafo. El uso de los colores y los encuadres son fundamentales y, sobre todo, que se conserve la mayor naturalidad posible”, mencionó.
A esta serie documental sobre los muéganos, siguieron trabajos relacionados con el paisaje y vida cotidiana en Tlaxcala, los cuales se han presentado en diversos espacios culturales de la entidad.
Actualmente, Roberto Murillo prepara una serie sobre el carnaval en Tlaxcala pero con niños huehues como protagonistas. La exposición estará a la vista del público en febrero próximo en las rejas del Palacio de Cultura, en la avenida Juárez, en Tlaxcala.
Actualmente existe una cultura visual muy fuerte, pues consumimos más imágenes que en cualquier otro momento de la historia, por ello es importante conservar esa naturalidad de la imagen que nos remite a la esencia de las cosas
Roberto Murillo / Fotógrafo
Para conocer la propuesta fotográfica de Roberto Murilllo, el artista comparte su página de Instagram @Pipiripunk.
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