Halcones, con nuevo plumaje

Jugó ante Espartanos y logró rescatar el empate

Armando Pedroza | El Sol de Tlaxcala

  · lunes 13 de enero de 2020

En juego de preparación, Halcones y Espartanos empataron a dos goles en los campos deportivos de la reserva ecológica de la Unidad Habitacional Santa Cruz /ARMANDO PEDROZA

Halcones logró rescatar el empate ante Espartanos de la categoría juvenil, durante la primera jornada de juegos amistosos de la liga Unidad Santa Cruz, después un autogol que definió las “tablas” para ambos conjuntos.

De esta manera, el club de los guerreros griegos que dirige Felipe Antonio Jiménez Cervantes hizo su incursión en el torneo que se juega en la reserva ecológica chiautempense.

Por parte del equipo de las aves veloces, representativo del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA) número 134 de San Francisco Tetlanohcan, presentaron su nuevo plumaje.

Empero, los estudiantes tuvieron que realizar rifas y aportaciones personales para adquirir el uniforme, ya que de la institución educativa no reciben ningún tipo de apoyo, a pesar de que integran el club de futbol, denunciaron.

INTENSIDAD FUTBOLERA

El primer juego del año para ambos equipos fue intenso de principio a fin, donde la ventaja en el marcador la logró el equipo de Halcones por conducto de Rosendo Cahuantzi García. Después, en la parte complementaria cayó la igualada con anotación de Eduardo Méndez Morales y minutos después lograron remontar la pizarra con gol de Brandon Flores.

Ahí, los Espartanos mandaron a la cancha a probar a dos elementos infantiles, para foguearlos con el nivel juvenil, pero en una acción desafortunada para el niño Luis Enrique Ávila, intentó detener el esférico con su pie izquierdo, pero desvió la trayectoria del balón y se fue al fondo de las redes para el autogol que le dio el empate a los Halcones.

  • Luis Enrique Ávila recibió una indicación de un compañero de equipo, cuando Halcones desbordó por el lateral derecho, mandaron un tiro centro que rebotó en el menor y cayó el autogol, después, desconcertado y apenado se echó a correr hacia donde estaban sus entrenadores, abrazó a uno de ellos y se esfumó.

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