Se cumplieron cinco años de la muerte de Rodolfo Rodríguez “El Pana”, el llamado torero “romántico” que conquistó a la afición mexicana. El apizaquense perdió la vida el dos de junio de 2016 cuando tenía 64 años de edad.
En Lerdo, Durango, toreó por última vez y lo hizo para resultar lesionado gravemente por una poderosa embestida del toro “Pan Francés”, de la ganadería de Guanamé. La caída le provocó lesiones cervicales que lo dejaron con un cuadro cuadripléjico.
Luego del hecho, y en cuanto fue estabilizado, lo trasladaron al Hospital Civil de Guadalajara, donde pasó sus últimos días.
“El Pana” fue sepultado en su natal Apizaco y fue acompañado por toreros activos y en el retiro, además de políticos, artistas y pueblo en general; hicieron honor a su persona y a su figura en el ruedo.
Murió después de 32 días de hospitalización por las complicaciones de la tetraplejia ocasionada al ser embestido y lanzado por los aires por un toro en una corrida en la ciudad de Lerdo, Durango, el uno de mayo.
El torero sufrió un paro cardiaco sin opción a reanimación además de que desde días antes padecía una neumonía.
Se le detuvo el corazón a pesar de los medicamentos”, dijo el médico Francisco Preciado, quien señaló que “El Pana” falleció a las 18:45 horas en el hospital civil de Guadalajara, a donde llegó el nueve de mayo de 2016 en una ambulancia procedente de Torreón.
RECUERDO
- Sus restos fueron paseados en la plaza de toros de Apizaco, que lleva su nombre; su muerte fue noticia nacional e internacional.