El ciclista de montaña, Julio Anica Becerril, pidió a la federación mexicana de su especialidad realizar en la entidad cursos de capacitación para entrenadores con el fin de profesionalizar esta labor y no quedarse en el empirismo.
Durante la visita de Edgardo Hernández Chagoya a Tlaxcala, señaló que no ha podido escalar en los cursos para técnicos de pedalismo, por lo que tiene pendiente llegar al nivel que se necesita para que con esa confianza se pueda acercar a un deportista y decirle lo que está haciendo mal.
“No debemos trabajar empíricamente sino con bases sólidas, metodológicas y dar seguimiento”, sostuvo.
Añadió que en ocasiones ha llegado gente al club Tonali “a la que le hemos abierto las puertas porque le gusta la bicicleta, pero hemos sido analíticos y hemos visto que algunos no son de montaña”
Mencionó que junto con Andy Portillo y Rogelio Rojas es referente del ciclismo de Tlaxcala.
Refirió que es triste mantener el nombre de Carlos López “porque atrás no tenemos nada, es contradictorio no tener más entrenadores en Tlaxcala, a nivel juvenil se quedan los cubanos, tenemos el parámetro para que en nuestro empirismo podamos ayudar pero después no sabemos qué hacer con los ciclistas, corregir fallas, qué hacer con ese talento”.
Subrayó que “esos garbanzos de libra hay que saber cómo pulirlos, cómo hacer que exploten bien y que no tengan dificultad para brincar a profesional”.
Pidió a Hernández Chagoya la capacitación para entrenadores, ya que preparados podrán acompañar a atletas a una olimpiada, “no llegar en tinieblas, ni penumbras, lo peor es que con esos talentos, valores que son los jóvenes, no llevamos una dirección”.
PARA SABER
Julio Anica Becerril es fundador hace dos décadas del club Tonali de ciclismo de montaña. Es esposo de Reyna Moctezuma, campeona panamericana master, integrada a la nueva mesa directiva de asociación
Esos garbanzos de libra hay que saber cómo pulirlos, cómo hacer que exploten bien y que no tengan dificultad para brincar a profesional
Julio Anica Becerril / Ciclista de montaña