Se les conoce como cochinitos, marranitos, caballitos o burritos, pero sin importar el cortador que se use para elaborar estas galletas, el sabor es el mismo. Sus notas de piloncillo, canela y anís se convierten en recuerdos en el paladar, pues desde hace décadas se venden en las calles de Tlaxcala en bolsitas de 3, 6 o 12 piezas.
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Tradicionales en el centro del país, estas golosinas se acompañan idealmente con café de olla, pues su origen está en un pan tradicional del sur del país llamado chichimbre.
De acuerdo con el Diccionario gastronómico de Larousse, esta palabra es una deformación del anglicismo ’gingerbread’, el pan de jengibre tradicional inglés.
La creencia es que estos panes llegaron a México en la Primera Guerra Mundial, con un imponente grupo de ingleses de las empresas que venían a extraer petróleo. Sin embargo, el jengibre fue sustituido por el clavo o el anís, los cuales se consumen mayormente en nuestro territorio.
Marcela Sánchez López, productora de estas galletas, sostiene que este panecillo fue popular a finales del siglo pasado, sin embargo, sigue siendo uno de los favoritos de los tlaxcaltecas. Además, es sustento de muchas familias, pues su producción se mantiene estable.
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Nos damos cuenta que les gustan a las personas porque, gracias a Dios, de eso vivimos. Todos los días horneamos unas 160 charolas de galletas para repartir.
La oriunda de San Cosme Xalostoc explicó que la receta de los caballitos, como ella los conoce, es una herencia familiar de más de tres generaciones, la cual mantienen viva gracias a la cooperación de todos sus integrantes.
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La tradición de los caballitos y los polvorones viene desde mi abuelito y más atrás. Ahorita nosotros nos dedicamos a esto y mis tíos también. Entregamos pedidos dentro y fuera de Tlaxcala y por ahora solo nos dedicamos a esto.
LA RECETA
Ingredientes:➡️El carnaval de Tlaxcala, una tradición que va más allá de los penachos
1 pieza de piloncillo
Media taza de agua
1 taza de manteca de cerdo
1 huevo
3 tazas de harina de trigo
Una pizca de sal
1 cucharada de canela en polvo
1 cucharada de anís en polvo
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Preparación:
A fuego medio, se debe preparar una miel con el piloncillo, la sal, el agua, la canela y el anís. Cuando todo esté integrado, se deja enfriar y se agrega la manteca poco a poco.
Luego se cierne la harina en un tazón y se agrega la miel, batiendo con ayuda de una cuchara de palo. Finalmente se agrega el huevo batido hasta integrar.
Hay que amasar la preparación hasta que se forme una masa homogénea, la cual debe extenderse sobre la mesa para comenzar a cortar en la forma deseada.
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Las galletas se acomodan en una charola para hornear engrasada y se barnizan con huevo batido con una cucharada de agua. Después se hornea por 15 minutos a 175 grados Celsius.
Entre más tiempo pasen en el horno, más crujiente será el resultado.