En México existen alrededor de 5,800 especies de arañas, pero solo dos de las que son caseras representan importancia médica. Se trata de la conocida como viuda negra (Latrodectus) y la araña violinista (Loxosceles), según expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La araña violinista es conocida por su marca en la cabeza en forma de violín. También se le llama “del rincón” porque los espacios reducidos, oscuros y húmedos son su hogar ideal. Mide de 1.8 a 3 centímetros de largo, tiene seis ojos, ocho patas y es de color café o gris. De acuerdo con Naturalista, las arañas del género Loxosceles se pueden encontrar en todo el mundo. Son más de 100 especies descritas en muchos países de Europa, África, Oceanía, Asia, Norteamérica y Sudamérica, donde han sido descritas más de 30 especies.
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En 2019, el aracnólogo Alejandro Valdez Mondragón, académico del Laboratorio Regional de Biodiversidad y Cultivo de Tejidos Vegetales con sede en Tlaxcala, junto con sus alumnas Claudia Navarro, Karen Solís, Mayra Cortez y Alma Juárez descubrieron la Loxosceles Tenochtitlan, un tipo de araña violinista nativa de Tlaxcala, la Ciudad y el Estado de México. Su nombre científico se refiere al antiguo nombre de la Ciudad de México, Tenochtitlan.
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Durante mucho tiempo, se creyó que estas arañas violinistas habían llegado como invasoras a las casas a través de plantas de ornato desde otras partes del país e incluso se le llegaba a confundir con Loxosceles misteca, otro tipo de violinista con el que hicieron estudios de biología molecular para determinar sus características propias. Sin embargo, quedó asentado que estas arañas se distinguen del resto de Loxosceles por no tener colores llamativos, sino más bien un tono café oscuro y la mancha en forma de violín más definida que en otras especies.
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Las violinistas, a diferencia de lo que se cree, no son agresivas. De hecho, prefieren evitar el contacto con los humanos y la mayoría de su actividad la realizan de noche. Lo que sí es importante saber, es que en temporada de lluvia (que este año tendrá su auge en agosto y septiembre) hay que estar muy atentos, pues salen de sus rincones a reproducirse y encuentran como lugar acogedor los zapatos, la ropa o las camas. Estos espacios son donde regularmente se presentan mordeduras, de las cuales el 2.5% pueden ser mortales.
¡Si encuentras una no la mates!
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Si encuentras una araña de este tipo no es necesario matarla. Basta con sacarla de la casa y llevarla a un espacio alejado de la población humana o a algún centro de investigación de arañas. En caso de mordedura lo ideal es capturar la araña para que un médico determine si hay que utilizar antihistamínicos, desinflamatorios o algún suero en específico.
Por otro lado, se recomienda realizar limpieza constante en lugares en donde pudiera instalarse, como bodegas, alacenas o burós, sobre todo si los muebles conservan humedad. De igual forma, durante la temporada de lluvia es necesario sacudir ropa y calzado, ya que podrían estar enredadas en ellos.
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