Dulce de camote, calabaza y otros sabores de temporada; ¿con qué acompañas el pan de muerto?

El pan es uno de los elementos indispensables en un tradicional altar de Día de Muertos, el cual adquiere características particulares según la región del país; en Tlaxcala, son tres los que se elaboran de manera tradicional: hojaldras, pezuñas y tlacotonales. Sin importar de cual se trate, la experiencia de degustarlos no está completa sin los sabores que tradicionalmente los acompañan.

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Los dulces de temporada como el camote, la calabaza y las bebidas calientes crean una composición gastronómica con toques otoñales y muy mexicanos, que varían dependiendo el gusto.

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CAMOTE EN DULCE: TRADICIÓN EN LA MESA

En Tlaxcala y otras regiones del centro de México, el camote cocido en piloncillo es uno de los protagonistas de esta temporada. Se prepara hirviendo trozos de camote en agua con piloncillo, canela y cáscara de naranja, lo que da como resultado un postre suave y perfumado. Este dulce combina bien con el pan de muerto y además se sirve en ofrendas como muestra de gratitud hacia los difuntos.

CALABAZA EN TACHA: DULCE EMBLEMÁTICO DE DÍA DE MUERTOS

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Otro acompañante imprescindible es la calabaza en tacha, un dulce típico que se elabora con trozos de calabaza cocidos en una mezcla de piloncillo, canela y clavo. Esta preparación destaca por su sabor especiado que es un clásico para adornar las ofrendas. El contraste entre la suavidad de la calabaza y la textura esponjosa del pan de muerto lo convierten en una combinación infalible para disfrutar los sabores del otoño con todos los sentidos.

DULCES CRISTALIZADOS Y FRUTAS PARA TODOS LOS GUSTOS

En muchos hogares se suman los dulces cristalizados como higos, guayabas y naranjas, que aportan un toque festivo por sus colores y sabores. Estos dulces tradicionales, elaborados mediante la cocción lenta de frutas en azúcar, combinan perfectamente con el pan de muerto y se convierten en una alternativa más ligera para quienes buscan un toque afrutado.

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OTRAS VERSIONES DE LA TRADICIÓN

En los últimos años la creatividad de los panaderos y reposteros ha llevado a la aparición de versiones innovadoras que fusionan tradición con sabores contemporáneos. Desde el clásico espolvoreado con azúcar hasta opciones rellenas de cajeta o cubiertas con chocolate de conejito Turín.

Este año, los consumidores se enfrentan a una amplia oferta de panes de muerto y, aunque algunos se mantienen fieles a las versiones tradicionales, los panaderos señalan que las nuevas opciones no buscan reemplazar la tradición, sino enriquecerla.

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Entre otras variantes que también han surgido se encuentran el pan relleno de crema de avellana, chocolate oscuro y opciones con frutas cristalizadas. También los que decoran el pan con azúcar de colores o hasta flores comestibles.

¿BEBIDA PARA ACOMPAÑAR? CAFÉ, CHOCOLATE O ATOLE

La bebida también es fundamental en estas celebraciones. El chocolate caliente, por su textura espesa es un maridaje clásico con el pan de muerto. Pero si de tradiciones se trata, el atole en sus versiones de maíz o champurrado deja un sabor hogareño para compartir en familia.

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Por otro lado, el café de olla perfumado con canela y piloncillo es la opción perfecta para quienes prefieren algo menos dulce.

• 3 tipos de pan de muerto se elabora de manera tradicional en Tlaxcala: hojaldras, pezuñas y tlacotonales.
• Entre otras variantes que también han surgido se encuentran el pan relleno de crema de avellana, chocolate oscuro y opciones con frutas cristalizadas.