Un oso polar hambriento fue localizado en las afueras de la ciudad industrial de Norilsk, en el Ártico Ruso, cuando estaba buscando comida entre la basura, a más de 800 kilómetros de su hábitat tradicional.
Las imágenes del animal, visiblemente agotado, circularon por las redes sociales rusas. El oso fue visto por primera vez el domingo por la noche en la zona industrial de Talmaj, en el noreste de Norilsk, indicó a la AFP un responsable local de los servicios de medioambiente, Alexandre Korobkin.
"Todavía se desplaza en los alrededores de una fábrica, bajo el control de la policía y los servicios de urgencia, que garantizan su seguridad y la de los habitantes", indicó.
El miércoles está prevista la llegada a esta ciudad, situada más allá del círculo polar ártico, de un equipo de especialistas para inspeccionar al animal y decidir sobre su futuro.
Las incursiones de oso polares que buscan comida son cada vez más frecuentes en el norte de Rusia, a medida que su hábitat y su alimentación se deterioran como consecuencia del cambio climático y del deshielo.
Sin embargo, es poco frecuente que un oso polar llegue hasta Norilsk, a centenares de kilómetros de la banquisa. En Rusia los osos polares están reconocidos como una especie en peligro de extinción y está prohibida su caza.
En febrero, los habitantes del archipiélago ártico de Nueva Zembla vivieron una invasión de decenas de osos polares agresivos que buscaban comida.
Las autoridades tuvieron que declarar el estado de urgencia hasta que los osos se fueron unos diez días más tarde.