En una esquina de Tlaxcala, casi invisible para quienes la recorren con prisa, luce un pequeño altar que guarda la memoria de Miguel, el joven que perdió la vida de manera violenta en ese mismo lugar hace poco más de un año.
Se trata de una ofrenda modesta colocada por sus seres queridos para evitar el olvido del joven y del trágico acontecimiento que marcó a los vecinos del municipio una noche de marzo de 2023, específicamente sobre la avenida Vicente Guerrero, esquina con Allende del Centro Histórico de la ciudad capital.
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Información publicada por este medio refiere que, la noche de aquel viernes, al momento de cerrar su establecimiento donde vendía derivados de la mariguana con fines médicos y recreativos, un solitario sujeto con ropa oscura se acercó a Miguel con la intención de cometer un asalto y, al resistirse la víctima, le disparó en dos ocasiones en el pecho, privándolo de la vida casi al instante.
Para rememorar el acontecimiento, una placa metálica fue colocada en la pared donde ocurrió el hecho. Desde entonces, lleva su nombre y sus fechas de nacimiento y fallecimiento. Bajo su nombre, la inscripción reza a nombre de sus padres y hermano: “Siempre estarás en nuestros corazones y te amaremos por siempre”.
A propósito de la cercanía con el Día de Muertos, los seres queridos del joven colocaron un modesto altar que se ha convertido en una conmovedora muestra de la idiosincrasia mexicana por la vitalidad con la que se recuerdan los muertos.
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Cabe señalar que, según la tradición popular, cada 28 de octubre se recuerda con ofrendas a quienes murieron de forma repentina, como asesinatos, atropellados o en choques.
Desde el pasado lunes 28 y sobre una base de mantel naranja de 20 centímetros, fueron colocadas miniaturas de alimentos como pan y frutas. Junto a ellos, una botella que sostiene una rosa y una pequeña calabaza decorativa recuerdan la ausencia que dejó el asalto.