Según la región del país, los esquites se preparan y consumen distinto; sin embargo, no dejan de ser uno de los platillos de maíz más representativos de la cocina tradicional.
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Los esquites como aperitivo o antojito se venden en nuestra entidad en puestos callejeros, mismos que son parte indispensable en el paisaje mexicano.
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Como colación, cabe señalar que los esquites son fuente importante de fibra en nuestra dieta. El elote también es rico en potasio y ácido fólico, este último un aliado de diversas funciones cerebrales. Contiene vitamina B1 que es importante en el buen funcionamiento muscular y del sistema nervioso, además de que juega un papel primordial en la formación de los glóbulos rojos.
Los esquites también se consumen como guarnición y tienen preparaciones variadas a las que también se agregan otras hierbas de olor y caldo de carne.
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ORIGEN DE LOS ESQUITES
Cuenta la leyenda que los esquites, también conocidos como maíz tostado, fueron creados por Tlazocihuapilli, la única mujer que gobernó a los Xochimilcas y quien también dio vida a platillos como el Necuatolli, atole con miel, o los Tlapiques, envoltorios en hoja de tamal.
Los esquites que se conocen en la actualidad son preparaciones modificadas, consideradas mestizas.
Los ingredientes prehispánicos son el elote, el epazote y el chile, pero ingredientes como el limón se agregaron posteriormente con la llegada de los españoles y la mayonesa es añadida en siglo XIX, como parte de la influencia francesa.
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RECETA PARA GUARNICIÓN DE ESQUITES
1. En una sartén o cacerola grande, añadir mantequilla, cebolla picada y sofreír a fuego medio durante siete minutos.
2. Añadir granos de maíz de cuatro mazorcas y freír cinco minutos hasta integrar.
3. Agregar 250 mililitros de agua, hojas de laurel y sal al gusto. Mezclar y esperar a que hierva. En este punto, cubrir y dejar que se cueza de 20 a 25 minutos, o hasta que el maíz esté suave.
4. Escurrir los granos, reservar el agua de cocción y llevarlo a la sartén con mayonesa, queso feta, lima, cilantro picado y pimienta negra para crear una salsa cremosa que embadurne cada grano de maíz.
5. Servir inmediatamente y finalizar con más mayonesa, queso, cilantro picado, pimienta negra y chile en polvo.