Febrero es el mes más corto del año, sin embargo, es recordado por los cambios de clima bruscos que se presentan durante sus primeros días. De hecho, la frase popular “febrero loco y marzo otro poco” hace referencia a las fuertes ráfagas de viento que se presentan este mes y el subsecuente, así como las lluvias y heladas aisladas que despiden al invierno.
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En otras palabras, lo que sucede durante febrero y marzo son días en que los habitantes de México se sienten congelados y otros tan calurosos que podrían derretir cualquier cosa, lo cual tiene una explicación.
LA CIENCIA EXPLICA
Los cambios de clima que se dan durante febrero y marzo son consecuencia del encuentro de masas de aire que provienen de distintas regiones. De acuerdo con Meteored, la lucha es especialmente entre masas de aire polar y aquellas ráfagas cálidas de la atmósfera que provocan pequeños anticiclones.
Lo anterior se combina con el cambio de estación, lo cual genera un choque térmico en el territorio mexicano, proceso que se repite cada semana, por lo que la atmósfera se vuelve “loca”, al no lograr mantener una temperatura uniforme.
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En el tercer mes del año, los frentes y sus masas de aire frío comienzan a disminuir su intensidad y el aumento de temperatura anuncia la calurosa primavera, pero las grandes diferencias de temperatura que se presentan durante ambos meses provoca marcadas diferencias de presión, lo que genera vientos más fuertes.
Así que los primeros días de marzo suelen ser igual de inestables que febrero, de forma que el dicho popular tiene mucho de cierto.
EQUINOCCIO DE PRIMAVERA
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Durante el mes de marzo se hace presente el equinoccio de primavera, el fenómeno natural que se caracteriza porque durante el día se presentan las mismas horas de luz solar que de oscuridad por la noche. Esto se debe a la posición del eje del planeta con referencia al sol, siendo el momento que marca el inicio de la primavera.
En 2024 el equinoccio de primavera entrará a México el lunes 20 de marzo a las 23:25 horas.