/ viernes 24 de febrero de 2023

¿Por qué los desastres no son naturales?

La frecuencia de estos eventos se ha agudizado desde el 2010 a la fecha

Definitivamente, la preocupación por el cambio climático y, con ello, el aumento en la frecuencia de aparición de desastres, impregna las corrientes de vientos que recorren el mundo.

Si bien, a lo largo de la primera década del 2000, el mundo experimentó desastres muy significativos, en cuanto a pérdidas, la frecuencia de estos eventos se ha agudizado desde el 2010 a la fecha. Entre la década de los 70 a los 2000, se reportó una cantidad aproximada de entre 90-100 notificaciones por año de desastres de mediana y gran magnitud. Sin embargo, del 2001 hasta el 2020, esta cantidad se vio abruptamente elevada; se habla de 350-500 alertas por riesgos de dichas envergaduras por año (UNDRR, 2022).

Continúa leyendo:➡️Desastres naturales: ¿Podemos influir en ellos?

Actualmente, tanto en la academia como en el día a día, se desarrolla un debate que gira en torno a la siguiente cuestión: ¿los desastres realmente son naturales? (Banco Mundial, 2020). Esta puede ser una pregunta cuya repuesta tiende a divagar y a entrar en el campo de la heterogeneidad, ya que, como se menciona en Gascón (2009), la percepción tanto del desastre, como del riesgo, devienen de diferentes factores. A saber, la autora genera 2 arquetipos en torno a la percepción de estos fenómenos: 1. Interpretaciones míticas y religiosas: 2. El pensamiento científico. El primero, básicamente relata la manera en la cual diversas etnias “humanizan y materializan” las acciones y sentimientos -ya sea en individuo o en colectivo- a través de los diferentes comportamientos, patrones y fenómenos en general que se desarrollan en la naturaleza. Para el segundo caso, se retrata la percepción del desastre y del riesgo desde una representación mental de los comportamientos de la naturaleza misma.

De este modo, la respuesta a la pregunta inicial debe de considerar ciertas condiciones iniciales, mismas que se explicaron brevemente ya.

No dejes de leer:➡️Ocho de cada 10 municipios carecen de atlas de riesgos

RIESGO Y VULNERABILIDAD COMO FUERZAS MOTRICES DEL DESASTRE

Aun con lo anteriormente mencionado, autores como Blaikie, Cannon, Davis y Wisner han abordado este tema de una manera muy profunda y concreta. Para ellos, los desastres no son naturales del todo. Siguiendo, por tanto, a lo dicho en Blaikie et al (1996), el desastre -y el riesgo- comienza desde antes de la aparición de un fenómeno súbito, es decir, eventual. El margen conceptual que resulta menester de comprender es el hecho de que los desastres no son únicamente producto de procesos naturales. Sino que son, igualmente, producto de un conjunto de vulnerabilidades sociales, ambientales, políticas y económicas. Tal y como menciona Llanes:

No todas las manifestaciones violentas de la naturaleza, como los terremotos, los huracanes o las erupciones volcánicas, necesariamente se convierten en desastres. De la misma manera, cuando ocurre un desastre, éste no siempre es resultado exclusivo de la amenaza natural por sí sola, ya que lo que hacen los seres humanos, o lo que no hacen, por lo general es un factor clave Llanes, 2003.

Te puede interesar:➡️Se duplicaron los desastres naturales: ONU

El riesgo

El riesgo es el concepto más complejo cuando se habla de desastres. Esto se comenta debido a que el riesgo es, por sí mismo, un término que engloba todo un conjunto de estructuras institucionales y organizacionales desarrolladas a través del territorio. El riesgo se construye con el telar de los diferentes contextos socioeconómicos, urbanos, ambientales, político-ecológicos, etc. En esencia, el riesgo es el producto de distintos procesos interespecíficos en el espacio tiempo, mismos que dependen de las amenazas, la exposición, las vulnerabilidades y las capacidades institucionales para reducir este riesgo.

La vulnerabilidad

Lee también:➡️Desplazamientos aumentan en el mundo por conflictos y desastres naturales

En la anterior sección se utilizó el término de vulnerabilidad; un concepto bastante utilizado en la gestión del riesgo. En palabras someras, la vulnerabilidad se entiende como un componente de la construcción del riesgo. La vulnerabilidad se puede definir como la propensión de los sistemas sociales o ecológicos a sufrir daños sistémicos a causa de fenómenos perturbadores que se traducen en desastres (Orozco & Guevara, 2011). Además, este concepto tiende a ser acumulativo, es decir, se consolida como el resultado de diversos procedimientos interespecíficos que interactúan para desembocar en desastres. En otras palabras:

Las condiciones de vulnerabilidad se van gestando y pueden ir acumulándose progresivamente, configurando una situación de riesgo. Finalmente, se puede decir que detrás de cada condición de vulnerabilidad física existen causas socioeconómicas que reafirman la idea inicial de que los desastres naturales no existen (Andrés y Rodríguez, 2008: pp. 26-27).

CONCLUSIONES: ¿LA VULNERABILIDAD CATALIZA EL DESASTRE?

Entérate:➡️Desastres naturales cuestan 250 mil mdd en 2021

Conforme a lo visto en este breve escrito, se puede inferir que, en efecto, los desastres no son naturales, sino que, por el contrario, son el producto de un sistema complejo con muchos eslabones vulnerables, mismos que desembocan en contextos y realidades susceptibles a sufrir ante ciertos escenarios en los cuales los fenómenos perturbadores (procesos naturales hidrometeorológicos, geofísicos y químico-biológicos) se suscitan.

Por lo tanto, el fortalecer la agenda política de gestión integral del riesgo, así como mejorar los planes de protección civil, son inherentes para la reducción del riesgo y de desastres. Pero, además de ello, es imperativo buscar sociedades en las que no haya pobreza urbana; sociedades en las que no haya pobreza energética; sociedades en las que la deuda ecológica no impida a países del sur global desarrollar modelos de resiliencia y adaptación. Además de ello, se debe de apelar a una cooperación internacional para los países más afectados históricamente y que aún acarrean legados que impiden su gestación soberana e idónea. Básicamente, se debe buscar reducir las desigualdades estructurales desarrolladas históricamente, para que se pueda partir de una base funcional.

Te recomendamos:➡️Cambio climático empujó a 100 mil mexicanos fuera de su hogar

Referencias

Andrés, P., Rodríguez, R. (2008). Evolución y Prevención de Riesgos Ambientales en Centroamérica. Documenta Universitaria. Pp- 26-27

Banco Mundial. (2020). Los desastres no son naturales. Recuperado de: https://bit.ly/3QUl4qS

No te pierdas:➡️Cruz Roja y Coparmex firman acuerdo de colaboración para apoyo en desastres y emergencias

Blaikie, P., Cannon, T., David, I., Wisner, B. (1996). Vulnerabilidad: El Entorno Social, Político y Económico de los Desastres. Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América Latina.

Gascón, M. (2009). Percepción del desastre natural. Editorial Biblos. pp.17-35

Jiménez, A. S. (2022). Ponencia en Diplomado en Cambio Climático y Gestión del Riesgo de Desastres. Tecnológico de Monterrey

Llanes, C. (2003). Los desastres nunca serán naturales. Revista Invi. Universidad de Chile. Recuperado de: https://bit.ly/3HmT4sA

Lee más:➡️Incendios de verano baten récord de CO2

Orozco, G., Guevara, O. (2011). Gestión Integrada del Riesgo de Desastres. Universidad del Norte. Pp. 20-21

UNDRR. (2022). Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres: 2022. P. 17. Recuperado de: https://bit.ly/3wpPHL9

REFERENCIAS:

Andrés, P., Rodríguez, R. (2008). Evolución y Prevención de Riesgos Ambientales en Centroamérica. Documenta Universitaria. Pp- 26-27

Continúa leyendo:➡️Aumentan desastres climáticos en el mundo

Banco Mundial. (2020). Los desastres no son naturales. Recuperado de: https://bit.ly/3QUl4qS

Blaikie, P., Cannon, T., David, I., Wisner, B. (1996). Vulnerabilidad: El Entorno Social, Político y Económico de los Desastres. Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América Latina.

Gascón, M. (2009). Percepción del desastre natural. Editorial Biblos. pp.17-35

Jiménez, A. S. (2022). Ponencia en Diplomado en Cambio Climático y Gestión del Riesgo de Desastres. Tecnológico de Monterrey

No dejes de leer:➡️Alto costo de vida y desastres naturales, los riesgos económicos a mediano plazo: WEF

Llanes, C. (2003). Los desastres nunca serán naturales. Revista Invi. Universidad de Chile. Recuperado de: https://bit.ly/3HmT4sA

Orozco, G., Guevara, O. (2011). Gestión Integrada del Riesgo de Desastres. Universidad del Norte. Pp. 20-21

UNDRR. (2022). Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres: 2022. P. 17. Recuperado de: https://bit.ly/3wpPHL9


Definitivamente, la preocupación por el cambio climático y, con ello, el aumento en la frecuencia de aparición de desastres, impregna las corrientes de vientos que recorren el mundo.

Si bien, a lo largo de la primera década del 2000, el mundo experimentó desastres muy significativos, en cuanto a pérdidas, la frecuencia de estos eventos se ha agudizado desde el 2010 a la fecha. Entre la década de los 70 a los 2000, se reportó una cantidad aproximada de entre 90-100 notificaciones por año de desastres de mediana y gran magnitud. Sin embargo, del 2001 hasta el 2020, esta cantidad se vio abruptamente elevada; se habla de 350-500 alertas por riesgos de dichas envergaduras por año (UNDRR, 2022).

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Actualmente, tanto en la academia como en el día a día, se desarrolla un debate que gira en torno a la siguiente cuestión: ¿los desastres realmente son naturales? (Banco Mundial, 2020). Esta puede ser una pregunta cuya repuesta tiende a divagar y a entrar en el campo de la heterogeneidad, ya que, como se menciona en Gascón (2009), la percepción tanto del desastre, como del riesgo, devienen de diferentes factores. A saber, la autora genera 2 arquetipos en torno a la percepción de estos fenómenos: 1. Interpretaciones míticas y religiosas: 2. El pensamiento científico. El primero, básicamente relata la manera en la cual diversas etnias “humanizan y materializan” las acciones y sentimientos -ya sea en individuo o en colectivo- a través de los diferentes comportamientos, patrones y fenómenos en general que se desarrollan en la naturaleza. Para el segundo caso, se retrata la percepción del desastre y del riesgo desde una representación mental de los comportamientos de la naturaleza misma.

De este modo, la respuesta a la pregunta inicial debe de considerar ciertas condiciones iniciales, mismas que se explicaron brevemente ya.

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RIESGO Y VULNERABILIDAD COMO FUERZAS MOTRICES DEL DESASTRE

Aun con lo anteriormente mencionado, autores como Blaikie, Cannon, Davis y Wisner han abordado este tema de una manera muy profunda y concreta. Para ellos, los desastres no son naturales del todo. Siguiendo, por tanto, a lo dicho en Blaikie et al (1996), el desastre -y el riesgo- comienza desde antes de la aparición de un fenómeno súbito, es decir, eventual. El margen conceptual que resulta menester de comprender es el hecho de que los desastres no son únicamente producto de procesos naturales. Sino que son, igualmente, producto de un conjunto de vulnerabilidades sociales, ambientales, políticas y económicas. Tal y como menciona Llanes:

No todas las manifestaciones violentas de la naturaleza, como los terremotos, los huracanes o las erupciones volcánicas, necesariamente se convierten en desastres. De la misma manera, cuando ocurre un desastre, éste no siempre es resultado exclusivo de la amenaza natural por sí sola, ya que lo que hacen los seres humanos, o lo que no hacen, por lo general es un factor clave Llanes, 2003.

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El riesgo

El riesgo es el concepto más complejo cuando se habla de desastres. Esto se comenta debido a que el riesgo es, por sí mismo, un término que engloba todo un conjunto de estructuras institucionales y organizacionales desarrolladas a través del territorio. El riesgo se construye con el telar de los diferentes contextos socioeconómicos, urbanos, ambientales, político-ecológicos, etc. En esencia, el riesgo es el producto de distintos procesos interespecíficos en el espacio tiempo, mismos que dependen de las amenazas, la exposición, las vulnerabilidades y las capacidades institucionales para reducir este riesgo.

La vulnerabilidad

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Las condiciones de vulnerabilidad se van gestando y pueden ir acumulándose progresivamente, configurando una situación de riesgo. Finalmente, se puede decir que detrás de cada condición de vulnerabilidad física existen causas socioeconómicas que reafirman la idea inicial de que los desastres naturales no existen (Andrés y Rodríguez, 2008: pp. 26-27).

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Conforme a lo visto en este breve escrito, se puede inferir que, en efecto, los desastres no son naturales, sino que, por el contrario, son el producto de un sistema complejo con muchos eslabones vulnerables, mismos que desembocan en contextos y realidades susceptibles a sufrir ante ciertos escenarios en los cuales los fenómenos perturbadores (procesos naturales hidrometeorológicos, geofísicos y químico-biológicos) se suscitan.

Por lo tanto, el fortalecer la agenda política de gestión integral del riesgo, así como mejorar los planes de protección civil, son inherentes para la reducción del riesgo y de desastres. Pero, además de ello, es imperativo buscar sociedades en las que no haya pobreza urbana; sociedades en las que no haya pobreza energética; sociedades en las que la deuda ecológica no impida a países del sur global desarrollar modelos de resiliencia y adaptación. Además de ello, se debe de apelar a una cooperación internacional para los países más afectados históricamente y que aún acarrean legados que impiden su gestación soberana e idónea. Básicamente, se debe buscar reducir las desigualdades estructurales desarrolladas históricamente, para que se pueda partir de una base funcional.

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Referencias

Andrés, P., Rodríguez, R. (2008). Evolución y Prevención de Riesgos Ambientales en Centroamérica. Documenta Universitaria. Pp- 26-27

Banco Mundial. (2020). Los desastres no son naturales. Recuperado de: https://bit.ly/3QUl4qS

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Blaikie, P., Cannon, T., David, I., Wisner, B. (1996). Vulnerabilidad: El Entorno Social, Político y Económico de los Desastres. Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América Latina.

Gascón, M. (2009). Percepción del desastre natural. Editorial Biblos. pp.17-35

Jiménez, A. S. (2022). Ponencia en Diplomado en Cambio Climático y Gestión del Riesgo de Desastres. Tecnológico de Monterrey

Llanes, C. (2003). Los desastres nunca serán naturales. Revista Invi. Universidad de Chile. Recuperado de: https://bit.ly/3HmT4sA

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Orozco, G., Guevara, O. (2011). Gestión Integrada del Riesgo de Desastres. Universidad del Norte. Pp. 20-21

UNDRR. (2022). Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres: 2022. P. 17. Recuperado de: https://bit.ly/3wpPHL9

REFERENCIAS:

Andrés, P., Rodríguez, R. (2008). Evolución y Prevención de Riesgos Ambientales en Centroamérica. Documenta Universitaria. Pp- 26-27

Continúa leyendo:➡️Aumentan desastres climáticos en el mundo

Banco Mundial. (2020). Los desastres no son naturales. Recuperado de: https://bit.ly/3QUl4qS

Blaikie, P., Cannon, T., David, I., Wisner, B. (1996). Vulnerabilidad: El Entorno Social, Político y Económico de los Desastres. Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América Latina.

Gascón, M. (2009). Percepción del desastre natural. Editorial Biblos. pp.17-35

Jiménez, A. S. (2022). Ponencia en Diplomado en Cambio Climático y Gestión del Riesgo de Desastres. Tecnológico de Monterrey

No dejes de leer:➡️Alto costo de vida y desastres naturales, los riesgos económicos a mediano plazo: WEF

Llanes, C. (2003). Los desastres nunca serán naturales. Revista Invi. Universidad de Chile. Recuperado de: https://bit.ly/3HmT4sA

Orozco, G., Guevara, O. (2011). Gestión Integrada del Riesgo de Desastres. Universidad del Norte. Pp. 20-21

UNDRR. (2022). Informe de Evaluación Global sobre la Reducción del Riesgo de Desastres: 2022. P. 17. Recuperado de: https://bit.ly/3wpPHL9


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