Cada 30 de enero se celebra el Día Internacional del Croissant, un homenaje merecido para este pan que ha conquistado paladares en desayunos, comidas y cenas alrededor del mundo. A continuación, te compartiremos un poco de su historia, que ha logrado ganarse corazones gracias a su exquisito sabor, aroma y textura.
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Para conocer el origen de este delicioso bocadillo, consultamos al reconocido chef César Brindis, experto en la materia y propietario de "Brindis Panadería Artesanal", en el centro de Tlaxcala. Explicó que el croissant, elaborado con masa, levadura y mantequilla, tiene sus raíces en Viena, Austria. Aunque existen diversas versiones sobre su creación, la más aceptada remonta a 1683, cuando panaderos vieneses inventaron esta delicia para celebrar la victoria sobre el Imperio Otomano, tras ayudar a los soldados del emperador Leopoldo I con señales de alarma para evitar ataques turcos.
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Según la historia, después de ganar la batalla, los panaderos de Viena crearon el croissant en forma de media luna, emulando el emblema utilizado por el Imperio Otomano, figura que se encuentra en su bandera, menciona el chef.
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César Brindis añade que "croissant" significa "creciente" en francés, y la palabra se utilizó por primera vez en 1863, formando parte del diccionario francés "Littré". Además, en otros países latinoamericanos, este pan adopta diferentes nombres, como "Cachitos" en Venezuela, Perú y Ecuador, "Cruasanes" en Colombia, "Medialunas" en Chile, Uruguay, Argentina y Paraguay, y en algunos lugares de la región se les conoce como "cuernitos" o "cangrejitos".
Datos Curiosos:
El croissant es uno de los dulces más populares y consumidos en todo el mundo, apreciado especialmente en desayunos y meriendas.
Con su distintiva forma de media luna, el croissant puede ser tanto dulce como salado, ofreciendo una versatilidad que se adapta a diversos gustos.