De manera simple, un día se divide en día y noche considerando la presencia o ausencia de luz solar; de forma práctica para la lengua, el día puede dividirse en: madrugada (desde la medianoche hasta el amanecer), mañana (desde el amanecer hasta el mediodía), tarde (desde el mediodía hasta la puesta de sol) y noche (desde la puesta de sol hasta la medianoche); sin embargo, existen múltiples formas de segmentar las 24 horas de ciclo solar, una de ellas es la que utilizan pobladores de La Soledad, Calpulalpan y se trata de cuatro interesantes momentos: coro amanecer, día, coro atardecer y noche. La empresa de sustentabilidad “Las 4e”, dirigida por Elia Martínez, difunde este conocimiento ancestral regido por los sonidos:

CORO AMANECER

Coro amanecer: alude al sonido de las aves cuando inician su día. De acuerdo con el biólogo Ángel Mendoza de la Universidad de Perú, un estudio realizado en Ecuador permitió relacionar la posición de las aves en los árboles para determinar quién comienza a cantar primero. Se cree que el orden de inicio está ligado al tamaño de los ojos del ave: cuanto más grande empiezan primero. La clave está en la cantidad de luz que reciben. Mientras más cerca de la copa, más temprano comenzará el canto. El pinzón, el chochín, el acentor y el gorrión son algunas de las aves cuyo canto inaugura cada día

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DÍA

Día: el espacio temporal entre la salida y la puesta del sol se conoce como día. En este momento los animales diurnos realizan sus actividades básicas y entre ellas, se desata un paisaje sonoro que involucra mayor movimiento y provecho de estas horas. Infobae reconoce que muchas especies de aves aprovechan el amanecer y el atardecer para hacer sus cantos de territorialidad y alertar sobre posibles peligros, para comunicarse entre ellos y cuando los machos quieren atraer a las hembras. Poe ello, muchos utilizan las horas centrales del día para alimentarse por lo que están ocupados y los cantos son menos escuchados.

CORO ATARDECER

Coro atardecer: debido al decrecimiento de actividades diurnas, el paisaje sonoro parece más limpio y, por lo tanto, el canto de las aves vuelve a protagonizar los cielos. Sus voces también pueden ser una llamada para establecer contacto o para alarmar algún peligro antes de guarecerse.

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NOCHE

Noche: la noche es un periodo de paz auditiva. Los animales nocturnos tienden a ser silenciosos mientras que los diurnos están refugiados durmiendo. Aunque existen algunas aves que llegan a cantar de noche, su bullicio es minúsculo por el cuidado que tienen de no atraer depredadores. En ese sentido, la noche es un espacio de total calma.

Los pobladores de La Soledad tienen un fuerte arraigo a la protección de la fauna y flora del estado; por esa razón, su entendimiento de lo ordinario profundiza en la naturaleza como directora de las actividades diarias. Entre las aves que componen la fauna de la entidad se encuentran la codorniz, el pájaro carpintero, la paloma de alas blancas y el gorrión.

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