Los murciélagos que surcan los cielos al anochecer han sido objeto de mitos y miedos infundados propios de la época de Halloween. Asociados con criaturas de terror y enfermedades, se les considera una amenaza para los seres humanos. Pero, ¿realmente debemos tenerles miedo?
Los murciélagos son animales inofensivos y cumplen un papel fundamental en el equilibrio de los ecosistemas. Contrario a las ideas populares, la mayoría de las más de mil 400 especies de murciélagos en el mundo no representan peligro para los humanos.
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De hecho, solo tres especies son hematófagas, es decir, que se alimentan de sangre, y ninguna de ellas habita en zonas urbanas o tiene contacto frecuente con personas. Los murciélagos prefieren huir antes que atacar y evitan cualquier interacción con humanos. En Tlaxcala, están descritas 16 especies de ellos y no, ¡ninguna de qué preocuparse!
En cuanto al miedo relacionado con enfermedades como la rabia, es importante señalar que el riesgo de transmisión es extremadamente bajo. De hecho, la mayoría de los murciélagos no portan el virus, y los casos de contagio a humanos son rarísimos. Mantener una distancia respetuosa y no manipular animales silvestres es suficiente para evitar cualquier inconveniente.
SON HÉROES NOCTURNOS DEL ECOSISTEMA
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Lejos de ser una amenaza, los murciélagos desempeñan funciones vitales para el medio ambiente, en primer lugar, como controladores de plagas. Se estima que una colonia de murciélagos puede consumir hasta 3 mil insectos en una sola noche, lo que ayuda a mantener bajo control poblaciones de mosquitos y plagas agrícolas.
Por otro lado, se trata de polinizadores de plantas nocturnas, que incluye frutas como los higos, guayabas y el agave, esencial para la producción de mezcal y tequila. Sin los murciélagos, muchas de estas plantas no podrían reproducirse.
Leptonycteris yerbabuenae, conocido popularmente como murciélago magueyero, es una de las más de mil especies de mamíferos voladores. Este murciélago en particular, al ser una de las tres especies de Norteamérica que se alimentan de néctar, es responsable de la polinización del cactus y las plantas de agave en toda la región del norte de México, de acuerdo con National Geographic.
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Los murciélagos son dispersores de semillas y ayudan a regenerar los bosques debido a los frutos que consumen. Esto es crucial para la reforestación natural y el mantenimiento de ecosistemas saludables.
CÓMO TENER UNA CONVIVENCIA ARMONIOSA
La conservación de los murciélagos es fundamental para mantener el equilibrio ecológico. Por desgracia, la destrucción de su hábitat y el miedo infundado hacia ellos han provocado una disminución preocupante de sus poblaciones. Para convivir con ellos de manera segura y protegerlos, se recomienda:
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- Evitar el uso de insecticidas, que reducen las fuentes de alimento para los murciélagos.
- No destruir cuevas o refugios donde habitan, pues esto los obliga a buscar nuevas áreas y aumentar su vulnerabilidad.
- Evitar la propagación de su imagen como un mero símbolo del vampirismo o la muerte.