El jengibre, además de ser un fresco condimento, es una planta llena de propiedades benéficas para la salud, entre la más conocidas es que ayuda de forma natural a aliviar los resfriados.
En época de frío se recomienda consumirlo en té con un toque de canela y limón, ingredientes que al mezclarse logran un sabor un tanto picante y de aroma delicioso, que ayudan a combatir los síntomas de gripe y tos.
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, esta raíz también ayuda a activar los jugos digestivos, mejorando la absorción y asimilación de nutrientes en el cuerpo.
Reduce las náuseas, evita calambres, mejora el flujo sanguíneo y disminuye las migrañas; además combate el envejecimiento prematuro y reduce los niveles de estrés.
Sin embargo, existe una contraindicación: su consumo eleva la temperatura corporal, por lo que no se recomienda a pacientes con fiebre.
Continúa leyendo: