Para el dolor de estómago, la migraña, la tos y hasta para los nervios, la infusión de zacate o té limón ha sido el remedio natural por excelencia de las familias mexicanas. Sus largas hojas verdes están presentes en todo tipo de climas y paisajes, por esa razón, su consumo ya sea en agua o leche es tan común.
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Esta benéfica planta es oriunda de la India, pero desde hace siglos ha ganado popularidad en otras partes del mundo, incluyendo nuestro país.
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Por lo regular, las personas lo utilizan para aliviar el dolor de estómago, el vómito, la mala digestión y la diarrea. No obstante, la infusión también funciona para tratar la tos, gripa, dolor de cabeza, fiebre, nervios y colesterol. Lo cierto es que, como dicen las abuelitas, “es la planta que todo lo cura”.
Distribución en Tlaxcala
Gracias a la amplia distribución de planta de zacate en terrenos tlaxcaltecas, es muy fácil conseguirla en puestos y establecimientos de medicina herbal de cualquier municipio. Además, es muy económica y puede durar mucho tiempo guardada.
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En el mercado de Apizaco, la señora Dolores vende un ramillete de té limón por cinco pesos, el cual rinde para varios litros de infusión. De acuerdo con la comerciante, la especie no requiere muchos cuidados y tampoco ocupa tanto espacio; de hecho, ella aprovecha el beneficio de su planta sin necesidad de cuidarla en su terreno ubicado en Texcalac: la planta se da sola, aunque llueva o no llueva. La cortamos y vuelve a crecer, es muy abundante, expresó.
Como dato curioso
El botánico español Francisco Hernández relató en sus escritos el uso de las densas matas de té limón desde el siglo XVI; sin embargo, fue hasta el siglo XX que la Sociedad Mexicana de Historia Natural volvió a mencionarlo o recomendarlo, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina Tradicional Mexicana.
Actualmente, la Sociedad Farmacéutica de México reconoce la hierba como un antiespasmódico y eupéptico natural, es decir, que interrumpe los dolorosos espasmos y mejora la digestión.