AGUASCALIENTES, Ags. Las dificultades que enfrenta el sector automotriz en México se deben principalmente a la caída notoria en sus ventas, pues la producción nacional es de vehículos de bajo cilindraje, que ahora son menos aceptados en Norteamérica.
Esta situación mantiene atentos a muchos de los proveedores no sólo de Nissan que ha anunciado la reducción en su producción, sino de prácticamente todas las plantas armadoras instaladas en el país, manifestó el director general de Mex-Q, Óscar Carrillo Muñoz, que presta servicios de control de calidad con 14 sucursales en la República.
Ante los planes de Nissan y cuando ha sido necesario, se han visto en la necesidad de rehacer sus estrategias y maniobrar con su personal a fin de verse lo menos afectados posible, y en caso de que alguna planta llegue al paro técnico, en materia de proveeduría no se tengan repercusiones mayores.
Mencionó que una ventaja que tiene Nissan en comparación con otras marcas instaladas también en el país es que “sus modelos son altamente competitivos y esto de alguna manera da certidumbre a los proveedores que están en condiciones de maniobrar todavía con sus planes de trabajo”.
En su caso comentó, no ha sido necesario de anunciar paros laborales o recortar personal ante la situación que enfrenta la industria automotriz, pero se debe a que es proveedor en todas las plantas automotrices de distintas marcas instaladas en México.
En EU, debido al bajo costo de sus combustibles, la gente está en condiciones de manejar vehículos de mayor cilindraje.
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