Caminando sola por los pasillos de una mansión en lo alto de una colina es como Camila Sodi, en su personaje de Carmen, enfrentará por primera vez el suspenso en una película. Se trata de la cinta La herencia del mal, una historia de Cinépolis Producciones dirigida por Rodrigo Fiallega, que actualmente se encuentra en rodaje y que prevé su estreno para febrero de 2020.
En esta película, la actriz da vida a una periodista que después de la muerte de su madre regresa a la casa de su abuela, donde descubre que ella fue exorcizada ahí.
Camila Sodi regresa a la música
“Decido unirme a este proyecto porque nunca había hecho una película de suspenso. Pero también porque leí el guion y me pareció muy interesante la decisión de tener este personaje sola la mayor parte del tiempo. Me intrigaba que va a pasar con esta chica, a dónde la va a llevar este guion”, comentó Sodi en conferencia de prensa.
Para la actriz de Luis Miguel La Serie, adentrarse en este género fue complicado sobre todo en las primeras dos semanas de rodaje “porque le pasa algo muy fuerte al personaje que es lo que la incita a tomar este camino y la lleva a esta casa en la colina. Fue muy difícil, había momentos donde no podía parar de llorar, me metí en un lugar muy oscuro”, dijo.
Sin embargo comenzar la filmación de La herencia del mal en esta mansión ubicada en el Estado de México le resultó “un poco más mecánico porque el 80% de la película estoy sola, es muchísimo y nunca había hecho un proyecto así. Empecé a estar un poco más conmigo y me ayudó a salir de la energía que inevitablemente tienen los proyectos de suspenso”.
Sodi agregó que reafirmó unirse al proyecto por la libertad creativa que tuvo para la creación de Carmen. “Soy alguien que tiene muchísimas cosas que poner sobre la mesa, muchas preguntas, y me gusta meter mis manos en la sopa. Y ellos me escucharon, me dejaron; fue como un proceso donde yo también pude poner mi granito de arena en la parte creativa”, añadió.
En esta producción donde comparte créditos con Juan Pablo Castañeda, Juan Carlos Colombo y María del Carmen Farías, entre otros, Camila Sodi y la producción no estuvieron exentos de alguna actividad paranormal durante el rodaje. “Hubo una energía especial porque estábamos en un pueblo, en una casa arriba de una colina. Y la chava que hace de mi stund hubo un día que salió llorando porque la asustaron. Pero yo ya no quise saber mucho porque iba a estar todo el día”, finalizó.