Más de 15 años de carrera como actor no han sido suficientes para que Joaquín Cosío termine de conocer lo diversa que puede volverse su carrera. El actor ha pasado de interpretar personajes como El Cochiloco, en la cinta El infierno, que lo popularizó entre el público, a participar en cintas de comedia, de superhéroes o animaciones como Klaus, producción que Netflix estrenó este fin de semana y donde presta su voz.
Ahora el mexicano es uno de los actores latinos que participan en la secuela de Escuadrón Suicida, filme de DC donde comparte créditos con Margot Robbie, Idris Elba, Viola Davis, John Cena y Taika Waititi, bajo la dirección de James Gunn, quien ha llevado al cine las primeras dos cintas de Guardianes de la galaxia.
“Me sigue sorprendiendo mi propia fortuna”, dice emocionado el actor en entrevista con El Sol de México. “Ya he hecho algunas películas grandes: desde el mismísimo James Bond (007 Quantum) o El llanero solitario (junto a Johnny Depp y Armie Hammer), hasta ahora que repito esta enorme producción que es El Escuadrón Suicida, pero de alguna manera me sigue sorprendiendo, y al mismo tiempo, sigo estando muy alerta para poder dar lo mejor de mí y estar a la altura de los proyectos”, explica.
El actor admite que participar en proyectos de este nivel es sinónimo de un constante aprendizaje por todas las implicaciones técnicas y de producción que implica: “No vieras todo el universo que hay que aprender ya como actor, porque son nuevas maneras de producir, de hacer cine y de interpretar”.
Pero diversificarse no ha sido sencillo para el histrión: “La gente me identifica mucho como un villano, pero he hecho otras cosas con de otra textura y con otro matiz”. Por lo que buscar historias que rompan con esta imagen es uno de sus mayores disfrutes como histrión.
“Yo tengo una imagen ruda, voluminosa o violenta, pues como actor tengo la obligación de hacer otras cosas para decirle a la gente que mi trabajo va más allá y que en realidad puedo hacer cosas como lo que hago ahora, que es prestar mi voz a una historia de animación”, dice.
Esa historia es Klaus, donde el ganador del Premio Ariel realiza el doblaje en español de este personaje junto a Sebastián Yatra. “Klaus es un carpintero que vive en un pequeño pueblo en medio de la nieve más espesa. Justo por estas temperaturas tan gélidas, no acostumbra mucho a comunicarse o a tener relación con otros, es un carpintero muy solitario y misterioso”, detalla.
“Su vida se ve cambiada por la llegada de Jesper (Yatra), un jovencito que es un estudiante para el servicio postal y que llega a este pequeño pueblo a revolucionar las cosas, buscando que los habitantes de este lugar se comuniquen y por ello Klaus es un elemento vital e importante”, comenta.
Klaus, en realidad es un vistazo al origen de Santa Claus, lo que para el actor es una oportunidad de llegar a un público más amplio, en este caso el infantil. “Esta historia entra de pronto con una suavidad muy infantil y una dulzura relevante. Como actor, me parece importante que se hagan estas historias y participar en ellas”, finaliza.