La magia de las historias que predominaron en el cine de los años 60 y 70 fueron fundamentales en la carrera profesional de Brad Pitt. El actor recuerda la influencia que estas películas de la época dorada de Hollywood tuvieron en su vida y que lo llevaron a ser hoy uno de los actores de mayor influencia en la industria.
“Mis películas favoritas vienen de finales de los años 60 y los 70. Esa fue mi introducción al cine. Para mí en esa época se cuentan historias con fuerza... no sé cómo describirlo, pero diría que de ahí viene mi amor por el cine”, confiesa el actor quien recibe a El Sol de México para hablar sobre Había una vez en… Hollywood, su más reciente película donde es dirigido por Quentin Tarantino.
Ubicada en 1969, Había una vez en… Hollywood realiza una recreación de la época donde el glamour y el color eran sinónimo del cine que se realizaba en esos tiempos. “Teníamos un tipo de fantasía sobre el final de los años 60 en la película, porque en ese momento había una esencia muy fresca y era el nacimiento de una forma de contar historias”, comenta el actor mientras indaga en sus recuerdos sobre las películas de esa época.
“Surgían entonces Martin Scorsese, Francis Ford Coppola, Denis Hooper con Easy rider o El graduado, que también salió ese año.. Había un gran impulso para el gran cine. Y nosotros (durante la filmación) romanceábamos viendo las fotos de esa época. Parecía un gran momento de apertura para el arte, para la expresión e incluso para la atracción sexual”, destaca Pitt.
Había una vez en… Hollywood, que estrena este viernes en cines, es también un retrato sobre la crudeza en la meca del cine. La cinta protagonizada también por Leonardo DiCaprio cuenta la historia de Rick Dalton, un actor de televisión que junto a su doble Cliff Booth (Pitt), adquirió fama durante la década de los años 60, pero para finales de ésta comienza su declive artístico, el rechazo de la industria y consigo el temor al olvido.
¿Alguna vez tuviste este miedo a ser olvidado? Se le pregunta al actor. “Específicamente en esos términos no lo creo”, responde con seguridad. “Creo que es más bien un sentimiento universal que sucede en los seres humanos, cuando no sabes bien de qué se trata la vida, cuando te cuestionas por qué estamos aquí, qué estamos haciendo, encontrando el significado”.
“¿Sabes de qué se trata? -dice con entusiasmo- , de encontrar tu valor, en donde lo encuentras, si tu valor está allá afuera, en cómo la gente te recibe, o la encuentras en lo qué haces. Esa es la pregunta”, añade el actor que se consagró en Hollywood con películas como 12 monos, Se7en, Entrevista con el vampiro o El club de la pelea.
También productor de cintas como 12 años esclavo, por la cual ganó un Oscar en 2014 en la categoría de Mejor Película, Brad Pitt reconoce que durante sus más de 30
años de trayectoria ha encontrado cambios en la industria que le parecen gratificantes. “Veo hacia el pasado con reverencia”, dice después de pensar su respuesta durante unos segundos.
“Ha sido muy divertido ver todos estos cambios porque cuando yo comencé mi carrera comenzaba el final de las grandes películas de acción de Arnold Schwarzenegger o Silvester Stallone... y de pronto llega este chico llamado Quentin Tarantino con Perros de reserva y apunta hacia una dirección completamente distinta, hacia el cine independiente”, explica.
El actor que hace dos años protagonizó War machine para Netflix reconoce que la industria “está en este punto donde los servicios de streaming están tomando el mando y haciendo grandes materiales como a finales de los 60. Esto cruza con el valor de los talentos que existen ahora. Para mí, es la cosa más revolucionaria que me ha tocado ver”, dice.