Glasgow, la ciudad inglesa situada a las orillas del río Clyde, en las Tierras Bajas de Escocia, nos puede parecer sumamente lejana en muchos sentidos. Aunque musicalmente es demasiado familiar para los seguidores del rock indie de las últimas tres décadas.
Basta con recordar nombres como Primal Scream, Simple Minds, Franz Ferdinand, CHVRCHES, Travis o Mogwai, para traer a la mente algunas de las maravillas musicales que esta urbe, la tercera en importancia del Reino Unido, le ha regalado al mundo desde entonces.
Aunque esa lista no estaría completa sin mencionar a Belle and Sebastian, el imprescindible conjunto de nerds que recién cumplió su primer cuarto de siglo produciendo una fusión de folk rock, indie y chamber pop de impecable manufactura, y con la que la banda comandada por Stuart Murdoch se ha ganado a pulso el estatus de leyendas vivientes de la música independiente.
Este 2022, la banda está de regreso con A Bit of Previous, su décimo álbum de estudio y el primero de larga duración en siete años. Y es un álbum digno de destacar porque mantiene intacto el estilo tan reconocible de la banda y al mismo tiempo suena fresco y pertinente, algo que no cualquiera puede lograr y menos con 25 años de carrera a cuestas.
Producido y grabado por la propia banda, su sello discográfico Matador Records, presume este trabajo como “Un álbum clásico de Belle and Sebastian que se preocupa por canciones y melodías que no dejarán tu cabeza y letras que pueden hacerte sonreír pero también ponerte melancólico”.
Y es que esa dicotomía entre felicidad y nostalgia es el sello que los ha identificado cuando menos durante los últimos cinco discos; una característica que aparentemente llegó para quedarse desde 2003, cuando lanzaron el ya clásico Dear Catastrophe Waitress.
Pero estamos en el siglo 21, y para averiguar más sobre esta nueva obra nos conectamos vía Zoom con su tecladista Chris Geddes y con su vocalista/violinista Sarah Martin, quienes encienden su cámara y nos ofrecen su sonrisa más cálida antes de comenzar la charla:
A Bit of Previous es su primer álbum en siete años, pero también el primero que graban en su natal Glasgow en 20 años. ¿Cómo se sienten al respecto?
Sarah: Yo estoy emocionada de que finalmente salga, porque he pasado mucho tiempo esperando este momento, aunque también fue muy agradable todo el proceso. Definitivamente fue bueno volver a trabajar juntos en un disco después de tanto tiempo.
Chris: Sí, aunque como también estuvimos ocupados con otros proyectos, supongo que eso hizo que no se sintiera como si hubiéramos dejado de trabajar durante mucho tiempo desde el último disco.
Cuenta la banda que la pandemia los hizo abortar sus planes de grabar en California, pero que esa situación provocó una dinámica que resultó más refrescante para ellos, sin tener que estar sujetos a restricciones de horarios de los estudios y disfrutando de largas caminatas por las calles y los parques de Glasgow, todo lo cual se tradujo en decisiones creativas que aparentemente fueron positivas.
Hay algo de nostalgia en estas canciones pero también energía y optimismo, continuando con esa tradición que inauguraron hace ya casi dos décadas.
Sarah: ¡Sí! Hay bastante energía.
Chris: Creo que desde el comienzo de la banda, el optimismo siempre ha sido una especie de núcleo entre nosotros, porque la clave de la banda comenzó con la energía de escribir canciones y de ser creativo, siempre se ha tratado de eso.
Antes del lanzamiento oficial del disco, la banda había dado a conocer tres adelantos del mismo, que fueron los sencillos “Unnecessary drama”, “If they're shooting at you” y “Young and stupid”, esta última una especie de clásico instantáneo que reza entre sus líneas:
Ahora somos viejos con huesos crujientes / Algunos con compañeros, algunos solos / Algunos con niños y otros con perros / Superando el trabajo nocturno / Todo está bien cuando eres joven y tonto / Todo es divino cuando eres joven y tonto...
La canción, que musicalmente ellos consideran una especie de rendición a T.Rex, nosotros la interpretamos como un mensaje para los jóvenes acerca de que los problemas a esa edad no son para tanto, aunque Sarah y Chris aclaran que en realidad la hicieron pensando en los que ya somos mayorcitos:
“Me encanta esa canción, creo que es genial. Pero creo que habla más bien de las personas mayores que tal vez miran hacia atrás cuando las cosas no tenían consecuencias, aunque luego ves que debes enfrentar las consecuencias de tus acciones”, argumenta Sarah.
“Sí, estoy de acuerdo, al menos yo miro hacia atrás y recuerdo a mi yo más joven, que creo que fue muy tonto, así que puedo relacionarlo con eso”, agrega Chris.
En la parte más vigorosa del disco destacan tracks como “Talk to me talk to me” y “Reclaim the night”; la primera una suite eufórica de más de 140 bpm repleta de sintetizadores y trompetas, y la segunda un alegre corte que habla de una inquietud intergeneracional de las mujeres en pleno 2022.
¿Qué fue lo que hizo que los escuchemos tan renovados en canciones como “Talk to me talk to me” y “Reclaim the night”? ¿Fueron conscientes de que eso sucedió?
Sarah: Bueno, en “Reclaim the night” trabajamos con el productor Matt Wiggins, quien vino de Londres y durante las sesiones nos dijo que no sabía cómo hacer que sonara moderna esa canción… Yo sólo pensaba en que no quería que se convirtiera en un pastiche retro, pero al final vimos que teníamos nuevos tonos sonando en nuestra paleta.
Chris: Sí, es como hacer sonar de una forma moderna a un instrumento antiguo. Ya habíamos incorporado elementos electrónicos anteriormente, pero creo que de una manera diferente. Por otro lado, creo que Bob (Bobby Kildea, el guitarrista de la banda) se ha vuelto más tonal y aventurero con los años; creo que ahora está menos interesado en tocar tonos directos de guitarra y más interesado en usar pedales y encontrar combinaciones diferentes a las que ha hecho antes, y eso definitivamente nos ayuda a cambiar el sentido en algunas ocasiones.
Del otro lado de la moneda se encuentran algunas de las baladas más conmovedoras de la nueva época de la banda, como "Do it for your country" y "Sea of sorrow" que nos dejan ver el genio inacabable de Murdoch, así como la aportación un poco más country de Stevie Jackson en "Deathbed of my dreams". Lo dicho: las dos mejores facetas de B&S continúan intactas.
¿Cuál es su canción favorita de este disco y por qué?
Sarah: La que me gusta más es “Working boy in New York City”, Recuerdo mucho el día que hicimos esa canción; fue un sentimiento tan encantador y disfruté especialmente tocar la flauta, con un espíritu muy destilado que creo que la hizo asombrosa y esperanzadora. Es una canción reconfortante, con un bonito mensaje positivo.
Chris: Si tuviera que elegir sólo una diría que la misma que Sarah, pero en aras de la diversidad diré que “Reclaim the night” porque, como dijo ella, trabajar en eso con Matt y pensar en un arreglo de sintetizador fue realmente bueno.
Siempre he querido preguntarles: ¿Cómo eligen a las personas que aparecen en las portadas de sus discos? ¿Son gente que sólo aparece en fotos aleatorias o de dónde salen?
Sarah: No estamos realmente involucrados en eso, es difícil saberlo (sonríe).
Este verano saldrán de gira por Norteamérica, aunque me entristece ver que a{un no está incluido México en ese tour.
Sarah: Sí, pero esperamos que se agregue pronto.
Chris: Claro, lo que pasa es que en el momento en que estábamos planeando esta gira aún no estaba del todo claro cómo serían las cosas con todo lo de la pandemia. Pero obviamente también estamos esperando volver a México. Con suerte eso se hará realidad muy pronto.
Y ya que estamos en eso, ¿cuál es su mejor recuerdo de México?
Chris: Tal vez el día que terminamos saltando entre la audiencia y volviendo de regreso al escenario.
Sarah: Ah, esa fue brillante, sí la recuerdo… ¡Buena ocasión!
En 2023 se cumplen 20 años de la salida de Dear Catastrophe Waitress, un disco que creo que fue un punto de inflexión en su carrera, porque a partir de ahí se convirtieron en un combo más alegre, ¿concuerdan con eso?
Chris: Totalmente, porque ese fue el primer disco que giró en torno a la banda completa y eso definitivamente marcó un punto distintivo en la banda.
Esto es lo que nos tiene preparado B&S en A Bit of Previous, una muestra de que la genialidad es inagotable, sobre todo cuando el arte de la música se practica con inspiración, empatía y claro, cierta dosis de socarronería. Bienvenido de vuelta el Belle and Sebastian de siempre, el que nunca se ha ido desde 1996.
Lee también otros contenidos de Normal ⬇️