La ex actriz porno, ahora convertida en una influencer de Instagram, explotó contra la industria del cine para adultos al ser contactada por un alto ejecutivo con quien trabajó en el pasado.
Mia hizo pública, mediante una captura de pantalla, la conversación que sostuvo con el líder de una prominente compañía de porno, con quien estuvo asociada hace 4 años.
En el chat, el empresario le pregunta a Mia si seguía en Los Ángeles, ella pregunta por qué, el motivo es para saber si le interesaría en hacer una transmisión pues de por medio habría una paga "genial", ella responde enfática que prefiere morir de hambre y que no lo volvería a hacer.
Déjame tomarlo abundantemente claro: Podría estar muriendo de hambre en la calle, viviendo detrás del basurero de un Starbucks y aún así diría que no a la oferta. No me vuelvas a escribir nunca Mia Kahlifa
Khalifa supo que ese acoso no debía quedar en el anonimato y utilizó Instagram para potenciar su mensaje y dejar en claro que no volvería a la industria.
En el mensaje que acompañó a su post, reveló que el porno fue "un error que cometí cuando tenía 21 años, casi arruinó mi vida y he sido afortunada en recoger las piezas y seguir adelante. No cometeré los mismos errores dos veces".
Finalmente, la celebridad libanesa advirtió a quien quisiera contactarla de nuevo, que le ofreciera la oferta a su propia hija pues "el dinero sería genial para ella".