Es un showman, es un actor, es un escritor, es un presentador, es un entrevistador y es un cantante con corazón de neón. Javier Gurruchaga a sus 61 años recién cumplidos el pasado 12 de febrero, sigue siendo un hombre de alma rebelde.
A él le gusta disfrutar el presente, por eso considera como una gran oportunidad su próxima presentación en el escenario del Vive Latino, donde junto con la Orquesta Mondragón, que él fundó celebrarán sus 42 años de carrera.
“Es un regalo sin que importe qué tantos minutos pueda ejecutar mi música con tal que la coreen las nuevas generaciones en letras como Corazón de neón, Lola Lolay Ponte peluca”, dijo el músico en entrevista con Organización Editorial Mexicana.
Entrevistado vía telefónica desde Madrid, el hombre de la personalidad teatral comentó que se presentará por segundo año consecutivo en el festival musical que este año cumplirá su 20 edición.
“En el 2018 me subí sólo cinco minutos para interpretar Corazón de neón como parte de los exponentes de Rock en tu idioma sinfónico y bueno, qué importa que tanto tiempo se pueda lograr, el beneficio solamente es estar ahí a manera de un agasajo musical”.
Al intérprete de Anda suelto satanás le emociona su encuentro con las masas juveniles que acostumbran llenar estos festivales musicales.
“Era impensable que en los ochenta se tocara rock y bueno nuestra presentación trae ese ambiente ochentero cuando corrían tiempos difíciles de fascismo y censura en el mundo”.
“Ahora el ídolo de masas fascista es DonaldTrump. Estamos retrocediendo. En la canciónQue viene Trumpnos referimos al gran payaso que es, no cae bien a nadie. Tiene un comportamiento autoritario, tirano, déspota e ignorante. No dudaré en ponerme la peluca para arremedarlo”.
Nadie duda que lo haga, porque la Orquesta Mondragón es un coctel que lleva como ingredientes un poco de rock y un poco de show de cabaret. Y Gurruchaga es uno y mil personajes en escena, no importa si está cantando o actuando.
Aunque a Gurruchaga no le preocupa que pasen los años, si está consciente de que el tiempo transforma a los individuos. “En nuestros veintes, no cuidabas la presión ni nada, ahora que ya llevamos 42 años de trayectoria, entre más café tomas automáticamente se te eleva la presión. El tiempo es implacable, es un tema para pensar y reflexionar. En México a la muerte se le trata de una forma y manera de humor genial con su fiesta de Día de Muertos y las imágenes de Guadalupe Posadas”.
Y aunque se congratula de la larga vida que tienen algunos grupos, como es el caso de la Orquesta Mondragón, dice que a él no le gustan los filmes biográficos que hacen recuento de los logros obtenidos.
“A mí no me gustan las jubilaciones o pensar que estoy a unos pasos de conocer a la parca”, dijo con ese sentido del humor tan de él y que seguramente plasmará en su actuación el próximo 17 de marzo en su concierto del Vive Latino.