Desde 2012 los músicos Agustín Sanolli, Jesús Osuna, Alonso Moreno y Frank Tovar, han buscado en más de una ocasión la forma de reinventarse y acercar su música a cada vez más público, aunque eso los lleve a mudarse de lugar e incluso revirar todo su proyecto.
El primero de sus cambios fue dejar su natal Sinaloa, donde tocaron en todos los lugares de rock en un estado donde imperan otros géneros, como el regional mexicano. En 2017 llegaron a Guadalajara, bajo el nombre de Vaquero Kamikaze. Luego, los azares del destino, como el que trajo la pandemia a todo el mundo, han hecho que estos músicos vuelvan a levantar la mirada en busca de nuevos horizontes.
“Punto de Quiebre en verdad que ha sido el desprendimiento de algo que ya no nos servía. Es algo que el público podrá notar en nuestras canciones, tanto en lo religioso como en la creencia política, porque ahora le damos la bienvenida al amor, a reírnos y llorar, y, sobre todo, a caernos para volvernos a levantar”, explica Agustín, vocalista de la banda, en entrevista con El Sol de México.
Con los bríos a tope, en la confección de su nuevo álbum, bajo la producción de Odín Parada, creador de la banda Sussi4, estrenan“Mientras siga respirando”.
“Esta canción refiere a eso exactamente y se ha vuelto como un estandarte para nosotros. Hay veces en las que todos nos hemos dado cuenta de que hemos caído y lo que queremos hacer primero es levantarnos y dar hacia arriba. Y es que sólo una vez vivimos en este planeta, así que hay que atorarle a las cosas que vengan, sean buenas o sean malas. Hay que hacer frente a todo siempre”, agrega el vocalista.
Este sencillo viene acompañado de su primer videoclip, en el que se cuentan cuatro historias sobre cómo ha sido el proceso de cada uno de los músicos para llegar hasta el día de hoy. Una producción visual que sugiere dar cara a los problemas del mundo contemporáneo.
➡️ Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante
A pesar de los cambios que han marcado su vida, los músicos aún recuerdan los primeros años en que comenzaron a juntarse para ensayar en un local en el centro de Culiacán, donde nacieron sus primeras notas y donde la gente, a pesar del predominante gusto por la música de banda, comenzó a acercarse a escucharlos, según relata Alonso, baterista de la agrupación.
Sobre esto Frank, el guitarrista, reflexiona: “En toda nuestra evolución siempre hemos tenido la meta por delante, pero eso no ha querido decir que siempre hemos estado ‘totalmente al tiro’, como decimos allá, porque creo que a todos nos ha pasado que hemos dicho ‘ya estoy cansado’. Pero precisamente estos cambios son lo que nos dicen también ‘aquí seguimos’, y pues aquí estamos”, finaliza Frank.