MOSCÚ. El realizador estadounidense Quentin Tarantino, quien se encuentra en Moscú para presentar su noveno filme, Érase una vez en... Hollywood, confesó a la prensa que se siente con fuerzas para hacer un décimo y último largometraje.
"Quiero hacer diez filmes. Tengo otra idea, lo que ven hoy es mi penúltima película. Puse en este filme todo lo que tenía, no quería que quedase nada por decir o por hacer", afirmó en la conferencia previa al estreno del largometraje en Rusia.
Según Tarantino, todavía no sabe qué pasará en su último filme, pero aseguró: "Si pensamos que todos los filmes de un realizador cuentan una sola historia, cada filme es un pequeño vagón de un enorme tren".
"Quiero hacer un enorme súper filme que englobe la lógica de toda mi obra", agregó.
En referencia a su novena cinta, de la cual había asegurado anteriormente que sería su última película, explicó que aborda el año 1969, una época que "era muy enérgica y muy alegre, pero que podría enseñar poco" a las próximas generaciones, a diferencia de los años setenta, cuando llega "el nuevo Hollywood".
"La idea del filme es que todo sucederá el año que viene, transcurre un año antes de comenzar los setenta, y los setenta sí pueden enseñar mucho al Hollywood del 2019", afirmó.
Tarantino recordó esta época, en la que tenía unos seis años, como un tiempo que le gustaba mucho, pero "algo anticuado", y admitió que aportó mucho de sus propias vivencias a la cinta.
El director señaló que aunque no vivió en la meca del cine estadounidense, visitó mucho esta ciudad, y recordaba detalles como el teatro chino, en el Hollywood Boulevard.