Después de 41 días de conflicto y constantes protestas, la Secretaría de Educación Pública del Estado (Sepe) relevó al cuerpo directivo de la Normal Rural Licenciado Benito Juárez, ubicada en Panotla, ante la inconformidad de las estudiantes por su permanencia.
En sustitución de Nadia Minor Ferra, asumió la dirección de la normal Iker Palacio Rodríguez; como subdirectora académica, Darnei Mendoza Morales y a cargo del área administrativa, Itzel Ponce López.
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Los tres docentes formaban parte de la plantilla laboral de la normal rural, los perfiles fueron avalados por la Dirección General de Educación Superior para el Magisterio, por lo que su representante César Romero mantuvo una reunión con el nuevo cuerpo directivo y con los docentes para la elaboración de una estrategia de recuperación de clases.
El titular de la Sepe, Homero Meneses Hernández, informó que en la minuta establecida entre la autoridad educativa estatal y las estudiantes quedó establecido que el cuerpo directivo sería definido por la Sepe, las estudiantes no intervinieron en la designación de perfiles.
El nombramiento del cuerpo directivo, señaló el titular de la Sepe, no da por concluidas las mesas de diálogo. El compromiso es mantener una mesa permanente, lo que nosotros queremos es fortalecer el normalismo rural.
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Meneses Hernández aseguró que el cambio en el cuerpo directivo no fue una remoción y señaló que el cambio se debió a que ya habían concluido con su periodo de nombramiento, por lo que el responsable de la Sepe llamó a no estigmatizar a las estudiantes por sus demandas.
No obstante, señaló que es necesario reflexionar sobre los métodos que aplican las estudiantes para hacerse escuchar, además, aseguró que las causas que enarbolan son compartidas por la autoridad estatal, sin embargo, insistió en que se mantenga el acuerdo de paz y no llegar a los extremos, que en esta ocasión le costó la vida a una estudiante identificada como Beatriz N.
RECUENTO DEL CONFLICTO
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El pasado 29 de agosto inició el ciclo escolar 2022-2023 y, dos meses después, las alumnas de la escuela Normal Rural licenciado Benito Juárez, en Panotla, regresarán a las aulas para dar continuidad al semestre.
Lo anterior fue posible al lograr un acuerdo entre normalistas y el gobierno estatal para hacer valer sus derechos de libre manifestación mediante el respeto al libre tránsito de las personas, así como privilegiar la paz social para evitar enfrentamientos.
No obstante, las negociaciones sobre el pliego petitorio, entregado el pasado 12 de septiembre a las autoridades educativas estatales, continuarán hasta ser atendidas todas sus demandas.
REVELAN ABUSOS
El ingreso a la normal rural no fue satisfactorio para diversas alumnas, quienes revelaron sufrir abusos, de ahí que de 70 estudiantes de primer semestre, 20 se dieron de baja y 10 permanecen de manera externa de la institución para evitar ser víctimas de atropellos físicos y psicológicos.
Hartas de la situación, acusaron diversos atropellos que deben soportar, pero pidieron la gracia del anonimato para evitar represalias.
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Compartieron que cuatro años dura la carrera en la normal rural y las alumnas tienen derecho a recibir atención médica, alimentaria, dormitorio, blancos, comedor, beca, uniforme y la enseñanza educativa, pero estos servicios son limitados o carentes cuando así lo determina el Comité Estudiantil, grupo integrado por alumnas de segundo y tercer grado encargadas de administrar los insumos de la escuela, acusaron.
Refirieron que al ser un internado, tienen permitido salir los fines de semana, de ahí que los viernes realizan limpieza para poder dejar las instalaciones y regresar el domingo entre 19:00 y 20:00 horas para continuar sus estudios durante la semana. No obstante, muchas jóvenes tienen impedidas estas salidas por castigo o capricho de las integrantes del Comité.
Dijeron que al estar con mucha presión, estrés y desgaste físico y psicológico, las estudiantes tienden a desarrollar enfermedades que no padecían, como malestares en las vías urinarias, migraña y males respiratorios, entre otras.
EL PLIEGO
Cada año, las alumnas de la normal rural entregan un pliego petitorio a las autoridades educativas del estado para mejorar las condiciones educativas. Este año, estuvo integrado por 87 puntos y fue dirigido a Homero Meneses Hernández, secretario de Educación Pública en el estado.
Entre sus demandas, destaca que su agrupación no sea hostigada y discriminada, atención a los requerimientos de la institución, el ingreso a las instalaciones durante los periodos vacacionales, transparencia y rendición de cuentas de los recursos asignados a la escuela.
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Pidieron dotación periódica de papelería, aumento a la matrícula de nuevo ingreso de 120 aceptadas, respeto al 50 % tlaxcaltecas y 50 % foráneas para el nuevo ingreso, que la edad máxima sea de 23 años para las aspirantes, difusión de la convocatoria de ingreso.
Demandaron el 100 % del pago de sinodales y proceso de titulación, pero el recurso deberá ser manejado por alumnas de cuarto grado que integren la comisión de egreso; apoyo del 100 % para combustible empleado en transporte y traslado para jornadas de observación y práctica docente para académicas de tercero y cuarto grado; dotación de material didáctico, mantenimiento a cañones y proyectores, dotación de libros de texto para las academias y nuevos títulos para la biblioteca.
Pidieron que las jornadas de observación y prácticas docentes, sean tomadas en cuenta como servicio social y experiencia laboral; implementación de cursos para atender a infantes con autismo y dislexia, cursos extracurriculares de la Dirección General de Educación Superior para el Magisterio y la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros; así como la implementación de maestría.
Otras solicitudes tienen que ver con la autorización y financiamiento de viajes de estudio, instalación de cortinas específicas en aulas, renovar equipos de cómputo, ampliar cobertura de la red de internet, rehabilitación y equipamiento del laboratorio de química.
También solicitaron mantenimiento bimestral de la alberca, impermeabilización de salones y dormitorios, dotación de colchones, roperos, mesas, sillas, literas, cobijas, cobertores y ropa de cama.
Incluso, demandaron apoyo para la realización de eventos sociales y culturales, incluido el menú para celebrar la apertura del ciclo escolar, Día de Muertos, preposada, cena navideña, Día de Reyes, 14 de febrero, Día Internacional de la Mujer, aniversario de la normal rural, graduación, 10 de mayo, Día del Estudiante y Día del Maestro, este último deberá ser para toda la comunidad estudiantil.
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Así como renovación del catálogo de productos que abastecen al comedor, raciones extra, servicio médico permanente los 365 días del año, dotación de medicamentos, asignar a una ginecóloga.
Exigieron la entrega puntual del uniforme de gala y deportivo, ambos deberán ser de buena calidad y personalizados; dotación de zapatillas y tenis, aumento en las partidas de artículos de higiene personal, los cuales son determinados por contenido y marca.
Entre sus solicitudes también está contar con un pants bordado y personalizado, el cambio del autobús, mantenimiento del centro de lavandería, instalación de iluminación, rehabilitación al taller de costura, soldadura y carpintería; así como la reparación y mantenimiento de espacios que lo requieran.
VIOLAN REGLAMENTO
De acuerdo con el Reglamento Interno de Conducta al que están sujetas las alumnas de la normal rural, durante la serie de protestas fue violado este documento.
En el apartado “Del comportamiento” establece que las estudiantes deben observar una conducta que dignifique a su persona y a la institución, además de que deben representar a la escuela con alto sentido de responsabilidad y eficiencia, de ahí que están obligadas a mostrar una conducta digna dentro y fuera de la normal rural.
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El documento agrega que en ningún momento y bajo ninguna circunstancia deben lesionar el nombre o prestigio de la escuela, así como fomentar la salud física y/o mental como elementos de garantía de una participación activa que requiere su formación.
Además, especifica que el personal directivo, docente, administrativo y manual debe ser tratado respetuosamente y abstenerse de establecer relaciones de tipo sentimental.
Otro punto es que deben respetar a sus compañeras e interactuar en un clima de fraternidad y trabajo cooperativo.
El apartado noveno y décimo del reglamento estipula que deben evitar realizar acciones que alteren el orden de la institución, evitar actos que vayan en contra de su salud física y mental (alcoholismo, drogadicción y robo).
Asimismo, no deben tomar objetos ajenos sin la autorización del propietario o responsable, evitar los traslados de “aventón”, no poseer armas u objetos que puedan causar daño a la comunidad escolar.
El último punto, señala que no deben incitar, provocar o participar en actos de violencia y tampoco encubrir a los infractores del reglamento.
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PROTESTAS CON DESENLACE FATAL
El pasado 11 y 12 de septiembre, estudiantes normalistas realizaron sus marchas anuales de Panotla a la ciudad de Tlaxcala, para recordar a una de sus compañeras fallecida durante un boteo en 2001, así como la entrega del pliego petitorio en demanda de mejores condiciones educativas y la destitución del cuadro directivo.
A partir de esa fecha las protestas fueron constantes, lo que afectó el transito vial en la ciudad de Tlaxcala, pero al no lograr una respuesta satisfactoria a sus demandas intensificaron sus protestas, incluso contaron con el apoyo de estudiantes de otras entidades, aunque estas acciones le costaron la vida a una joven.
De acuerdo con registros de este Diario, algunas de las marchas más significativas ocurrieron el 12 de septiembre, la cual generó caos vial y la protesta fue prolongada hasta la madrugada, pues las estudiantes permanecieron a las afueras de la Secretaría de Educación Pública del estado (Sepe).
Para el 29 de septiembre, las estudiantes se movilizaron al Centro Histórico de Tlaxcala para exigir la destitución del cuadro directivo, a quienes acusaron de incumplir los acuerdos con Sepe y dijeron ser víctimas de hostigamiento y represalias.
Las movilizaciones a la capital continuaron el seis y 11 de octubre para insistir en la remoción de la directora Nadia Minor, así como de Homero Meneses Hernández, secretario de Educación en el estado; incluso, las estudiantes se hicieron presentes el 13 de octubre durante la celebración del evento mundial de Tiro con Arco que tuvo sede en la entidad.
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Al no tener una respuesta a sus peticiones, el 14 de octubre las jóvenes arreciaron sus protestas y protagonizaron el robo de una camioneta de una empresa de muebles como medida de presión a sus exigencias, la unidad fue recuperada por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), este hecho fue descartado por las alumnas en una rueda de prensa, donde aseguraron que ellas no habían sustraído el vehículo.
El 16 de octubre nuevamente salieron a las calles, pero fue al siguiente día que las protestas fueron intensificadas al bloquear la autopista san Martín-Tlaxcala y robar combustible, incluso contaron con la presencia de alumnos de otras entidades.
El 20 de octubre, protagonizaron un enfrentamiento con elementos de la SSC, el saldo fue policías lesionados y patrullas dañadas. Respecto a las estudiantes, la joven Beatriz N., fue declarada con muerte cerebral tras sufrir un golpe contuso en el cráneo.
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Ante ello, el 23 de octubre las normalistas nuevamente realizaron protestas para exigir fuera esclarecida la muerte de su compañera y la destitución del cuadro directivo. Además, en sus redes sociales hicieron diversos pronunciamientos para evidenciar la represión del gobierno y continuar con su exigencia para destituir al cuadro directivo y al secretario de Educación.
QUEJAS
En la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado existen dos quejas por abusos que sufrieron las alumnas de nuevo ingreso, un documento tiene el número 87/2022 y el otro fue radicado como expedientillo por falta de firma con el folio 43/2022, ambos están a cargo de la Primera Visitaduría.
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*Con información de Diana Zempoalteca
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