Debido a su resistencia al frío, campesinos de la entidad optan por sembrar avena durante el “receso” que se presenta en el ciclo agrícola del maíz, lo que les permite seguir produciendo el campo y, a su vez, conseguir alimento para el ganado sin tener que comprarlo.
Juan Rodríguez, productor de avena, señaló que se debe sembrar este grano cuando otros productos no pueden por el frío y, de esta manera, se aprovecha el tiempo antes de preparar la tierra para el nuevo ciclo agrícola.
“Se ocupa en tiempos de heladas ya que se puede trabajar y resiste el frío, por eso la sembramos, para forraje de los animales, ya que la alfalfa se hiela y tendríamos más pérdida”, aseguró.
Mencionó que en una extensión de media hectárea de avena se pueden obtener hasta 100 pacas de 20 kilogramos, la cual es utilizada en su mayoría para alimentar al ganado, lo que representan un ahorro de seis mil pesos, “ya que una paca de avena se vende como en 60 pesos”.
Asimismo, detalló que la inversión de media hectárea de avena es de unos cuatro mil pesos, “ya que en agua se invierten mil pesos, otros dos mil pesos en químicos y el grano lo compramos como en 900 pesos”.
Señaló que en los próximos días retirarán toda su cosecha para comenzar a preparar la tierra para el próximo ciclo agrícola y el terreno debe quedar limpio para el maíz, ya que en el mes de abril comenzarán a sembrar.
Finalmente, aseguró que desde hace 30 años aproximadamente ya no llueve como antes,
“las lluvias se atrasan y ya no es como otros tiempos, ya que los ciclos son variables y antes de marzo no se puede sembrar”.