Ante la crisis económica por la emergencia sanitaria a causa del nuevo coronavirus y la modalidad de las clases virtuales, responsables de negocios de papelerías coincidieron en que las ventas están bajas.
Por su parte, las librerías siguen abiertas para vender a escuelas particulares los textos que usarán como respaldo para las asignaturas y para atender algunas instituciones públicas que solicitan libros de editorial.
Mientras tanto atienden vía correo electrónico y por teléfono para levantar los pedidos y hacer las entregas con las medidas sanitarias adecuadas.
Pero los comerciantes se mostraron optimistas porque en los siguientes días haya mejores ventas, por lo que mantienen abiertos sus locales.
Al respecto, Luis N., propietario de un papelería ubicada en la Loma Xicohténcatl de la ciudad capital, manifestó que mantienen abierto porque deben hacen frente al pago de la renta, pero sí registran ventas.
“Vienen a comprar que una cartulina, el lápiz, las copias, preguntan por los precios de los materiales. Confiamos en que aumenten las ventas porque están bajas en comparación al año anterior”, comentó.
A su vez, Laura N., dueña también de una papelería, reconoció que ante las bajas ventas y las medidas preventivas de distanciamiento social por la Covid-19, disminuyó su horario de atención.
Explicó que hay días en que no tiene ganancias, a pesar de que cumplió con las adaptaciones sanitarias porque lo requirió el ayuntamiento capitalino.
“La gente no viene a comprar, están muy flojos los días, por eso solo abro por las tardes. Cuando vendo es poco, quizá más adelante que se acerque el comienzo de las clases”.
Opinó que a pesar de que las clases sean virtuales, habrá material que los alumnos necesiten y deban comprar los padres de familia.
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