Tras dar a conocer que en el país se estima que se van a perder más de 800 mil empleos, José Francisco Ramírez Vázquez, docente de la Universidad Politécnica de Tlaxcala (UPTx), aseguró que ante la nueva normalidad el reto de los profesores es “hacer que los alumnos ya no piensen en ser empleados, sino que ahora sean empleadores, que tengan sus propias empresas”.
Como parte del ciclo de conferencias virtuales “Sal de la curva: Impulsando la economía local” que ofreció la UPTx, el también ingeniero en mecatrónica abordó el tema “Desarrollo de proyectos sustentables en la nueva normalidad”, en donde compartió que según la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, México enfrentará una recesión de caída del PIB de 7.5 %.
Por lo que ante esta problemática, busca compartir sus conocimientos para que las personas puedan crear una empresa, ya que “esta gran crisis también tiene grandes oportunidades y para ser una empresa vamos a seguir los siguientes pasos”.
Detalló que el primer paso será formar un equipo de trabajo, con solo tres personas de la misma carrera y que con el paso del tiempo y las necesidades se puedan agregar otros expertos.
No solo es integrarlo por integrarlo, sino que debe haber entre ellos una buena comunicación, coordinación, compromiso, confianza en que cada quien va a hacer lo que corresponde y sobre todo debe haber una complementariedad.
El segundo paso es buscar un problema o una necesidad a resolver, “esto tiene algunas características y objetivos que es que tenga un impacto mayor a cien mil personas, se pueden ayudar de la fila 2030 de la ONU, esto se refiere a que normalmente o idealmente todos los países deben de estar trabajando en esta agenda para ayudar a la sociedad”.
Asimismo, deben buscar una necesidad en su comunidad, la cual deberán ver que se pueda replicar en su estado, país o en otras partes del mundo.
“Esto que se escucha muy fácil, por lo menos a nosotros los ingenieros nos resulta muy difícil porque estamos acostumbrados a que nos dan el problema y lo solucionamos, aquí el reto es encontrar el problema y no pensar antes en la solución”, manifestó.
Como tercer punto, definió que deben pensar en una solución, para lo cual necesitan tomar tres aspectos en cuenta, “que sea tecnológicamente factible, económicamente viable y humanamente deseable, si alguno de estos tres no se cumple, enseguida tienen que pensar en otra solución”.
Dijo que cuando ya pensaron en la necesidad a resolver se debe buscar qué ya existe en el mercado y se debe de poner en una matriz de comparación para evitar caer en copias y ver las mismas características de lo que hay en el mercado, lo cual va marcar hacia dónde se tienen que mover para que su proyecto o producto sea realmente innovador.
El cuarto paso es crear un prototipo, “no tenemos que hacerlo como a nosotros nos gustaría, lo tienen que hacer con base en lo que (el cliente) realmente se necesita, y para lograrlo se requieren dos mapas de empatía, uno para usuario y otro para el cliente.
“En estos mapas lo que vamos a hacer es identificar qué los motiva, qué sienten, qué piensan, qué es lo que ven a su alrededor y estas características te van a decir qué es lo que necesitas, realmente el encontrar un problema casi te da el 80 % de la solución y, por último, se piden pruebas de validación, las cuales sirven para ver que el producto sea viable”.
EL DOCENTE
- José Francisco Ramírez Vázquez es egresado de la ingeniería en mecatrónica en el 2011, con experiencia en la industria textil y automotriz. En 2019 participó en un HUB de tecnología representando a Tlaxcala, donde despertó su visión de negocios. Actualmente, cuenta con un startup llamada Xenet Labs.
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