Después de que el pasado lunes fue clausurada la planta de tratamiento de aguas residuales ubicada en San Cosme Atlamaxac, en Tepeyanco, por personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y, a pesar de que el Centro de Servicios Integrales Para el Tratamiento de Aguas Residuales del Estado de Tlaxcala presentó el documento que avala las descargas, los sellos de la sanción no han sido retirados.
Lo anterior, debido a que dentro de las especificaciones que mandató la Profepa y que deben ser subsanadas se encuentra el que, además de contar con el permiso, se debe corregir el que dicha planta realiza descargas que exceden los límites máximos permisibles de parámetros como grasas, aceites y coliformes fecales.
Todo ello debido a que la descarga de aguas residuales tratadas, al no cumplir con la normatividad ambiental vigente, representa un riesgo inminente, daño y deterioro a los recursos naturales.
Además, las descargas deben cumplir condiciones particulares como capacidad de asimilación y dilución de los cuerpos de aguas nacionales, las cargas de contaminantes que éstos puedan recibir, metas de calidad y los plazos para alcanzarlas, lo cual se encuentra en proceso de sustanciación.
Finalmente, el escrito de la Profepa detalla que una vez habiéndose subsanado las medidas correctivas y de seguridad que marca la Ley de Aguas Nacionales, los sellos podrán ser retirados y la planta volverá a trabajar de manera normal.
CLAUSURA
Este sábado se cumplieron cinco días de que fue clausurada la planta de tratamiento, la cual se encontraba funcionando al 50 % de su capacidad instalada.