La Diócesis de Tlaxcala se unió a la conmemoración de “IV Jornada Mundial de los Pobres”, con la misión de motivar a creyentes y no creyentes a dejar de lado la cultura del derroche y compartir con más necesitados.
Durante su mensaje, previo al conversatorio “¿Quiénes son las personas en situación de pobreza en nuestra Diócesis?”, el Obispo de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino, llamó a los actos de caridad.
“Hermanos de nuestra Diócesis de Tlaxcala, a través de las parroquias, de la pastoral social, de la vida consagrada de los grupos y movimientos eclesiales y las familias, seamos esa mano tendida hacia nuestros hermanos”, exhortó.
Luego, aseveró que el Papa Francisco instituyó la jornada para que la Iglesia se convirtiera en signo concreto del amor hacia los más necesitados.
“El Papa, en su mensaje para la cuarta jornada, nos afirma que la oración a Dios y la solidaridad con los pobres son inseparables, la generosidad sostiene al débil, consuela al afligido, alivia los sufrimientos y devuelve la dignidad a los privados de ella”, soltó.
Recordó que la pandemia por Covid-19 y sus consecuencias, las han padecido la sociedad durante este año, lo cual, han evidenciado aún más la pobreza y la miseria entre los pueblos de Tlaxcala, México y el mundo.
Nuevamente, reconoció la labor de los médicos, enfermeras, administrativos, farmacéuticos, policías, soldados y todos aquellos que no han dejado de trabajar durante la pandemia, desafiando al nuevo coronavirus.
Por su lado, el párroco de San José, Marco Antonio Padilla Aguilar, aseveró que con ese conversatorio buscan tener acercamiento con la feligresía y apoyarla.
Continúa leyendo: