La pandemia por el nuevo Coronavirus generó que muchos comercios de la capital del estado tuvieran que adaptarse a los tiempos actuales, como la imprenta Printex, artículos promocionales y sociales que, tras ver escaso su trabajo e ingresos, decidió crear caretas y cubrebocas para infantes.
De acuerdo con Rodolfo Cuevas Contreras, “esta idea surgió a raíz del problema que estamos padeciendo y que nos va a llevar muchísimo tiempo, por lo que nos vimos obligados a hacer otro tipo de trabajos, como cubrebocas con diseño y caretas para adultos y niños”.
En este caso, los protectores faciales para los menores fueron creados para que los niños y niñas se sientan motivados a portarlas, ya que cuentan con diseños emblemáticos de sus personajes de películas favoritos, como Frozen, la Bella Durmiente y Patrulla de Cachorros, entre otros.
Por su parte, una persona que pasaba por el zócalo capitalino con un menor portando una careta, refirió que si bien en esta emergencia de salud lo más importante es cuidar el bienestar de la familia, también lo es ver que los niños se sientan cómodos y seguros al utilizar un objeto que jamás habían visto para protegerse de un virus que no conocen.
LOS COSTOS
El dueño de Printex, artículos promocionales y sociales, explicó que las caretas normales cuestan 30 pesos. “Es la más sencilla con acetato calibre del número 10”, pero hay otras más sofisticadas que traen gorra de gabardina con material de acetato calibre 12 y con remache intercambiable; sin embargo, el protector facial que más maneja es el de 120 pesos.
Señaló que todas las caretas tienen medida estándar, debido a que les colocan un resorte en la parte de atrás para que se ajusten según el tamaño de la cabeza.
Los interesados en adquirir uno de sus artículos pueden acudir a Printex, en calle Muñoz Camargo, entre Porfirio Díaz y 20 de Noviembre, atrás de Correos de México, o llamar al 46 67 669 o enviar un WhatsApp al 246 239 91 35.
Desafortunadamente dentro de mi ramo, que es la imprenta, no tenemos muchas ventas, entonces nos vemos obligados a hacer otro tipo de trabajos
Rodolfo Cuevas / Dueño de Printex
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